El presidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Sánchez, admitió ayer que esta entidad independentista "ayudó en el servicio del orden" de la manifestación de Barcelona contra el terrorismo por encargo de "los organizadores", es decir, de la Generalitat y el Ayuntamiento barcelonés.

Sin reparto de esteladas

No obstante, negó que favoreciese las protestas o repartiese esteladas y pancartas.

Estas declaraciones de Sánchez responden a las acusaciones que afirman que la ANC ubicó estratégicamente a colectivos independentistas en la protesta para visualizar un gran número de banderas secesionistas y para silbar y abuchear al Rey y al presidente del Gobierno al principio y al final de la manifestación.

Sin embargo, el Ayuntamiento de Barcelona negó a los pocos minutos las afirmaciones del presidente de la Asamblea Nacional Catalana , asegurando que fueron los Mossos d'Esquadra los que dirigieron el servicio de orden y que los voluntarios de la entidad independentista sólo repartieron flores.