El embajador británico en España, Simon Manley, negó ayer que el caso de Cataluña sea equiparable al de Escocia y subrayó, ante el proceso impulsado por la Generalitat, que el Reino Unido desea "que todos respeten la ley y el Estado de Derecho", algo "fundamental en un país democrático".

En una comparecencia informativa con motivo del próximo viaje de Estado de los Reyes al Reino Unido, Manley precisó que el desafío soberanista catalán no forma parte de la agenda de esta visita, si bien cree que "habrá conversaciones sobre estos asuntos", porque es "algo muy importante".

Asunto interno

En todo caso, se trata de "un asunto interno de España" que debe resolver este país, insistió el embajador, después de recalcar que Escocia y Cataluña "son dos casos distintos" porque el Reino Unido no posee una Constitución, a diferencia de España, y además hubo una votación en el Parlamento británico sobre el referéndum escocés.