Susana Díaz busca un PSOE unido bajo su mando que pueda hacerse "cargo de España". Por esa razón, y para "hacer más grande" al partido, la presidenta andaluza anunció ayer que, si vence en las primarias del próximo día 21, pedirá a sus dos rivales, Patxi López y Pedro Sánchez, que "arrimen el hombro".

Lo hará "en el minuto uno" de su triunfo, del que ella está convencida, y añadió que su meta de "unir" de nuevo al PSOE, la razón por la que lleva pidiendo "respeto a todos" los candidatos: "En este proceso no me han visto pedir el voto para ir en contra de un compañero, y en el minuto uno le pediré a Pedro y a Patxi que arrimen el hombro".

La mujer fuerte del socialismo español no quiso valorar los cambios que Sánchez ha hecho en su documento programático, en el que el ex secretario general ya no prioriza una alianza con Podemos y propone una plurinacionalidad de carácter "cultural" para el Estado. Pero sí advirtió que quien dirija el PSOE debe "tener muy claro" el modelo territorial y no modificar su postura sobre la cuestión catalana para "arañar un puñado de votos".

Por alusiones, Sánchez contestó que él no ha dado "volantazo" ninguno en sus posturas: "Aquí el único volantazo que se ha dado fue en octubre, cuando se apoyó al PP a espaldas de los afiliados y los votantes del PSOE". Sobre Podemos y la moción de censura que ha anunciado que no renuncia a "vertebrar el cambio" y sacar al PP del Gobierno junto a otras fuerzas de izquierda. Mariano Rajoy es "censurable", reconoció, pero no como quiere hacerlo Podemos.

López adelantó que si no resulta elegido el domingo 21, se pondrá "a disposición" del candidato que gane, porque hay que estar "juntos el cien por cien". Mientras tanto, pidió para sí el voto "útil" para "salvar" al partido.