El portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, defendió ayer que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, declare como testigo en el juicio del "caso Gürtel" por videoconferencia para no contribuir a "circos". En su opinión, los jueces podían haber llamado a declarar "a Rajoy o al Papa de Roma para que diga lo que sabía en ese momento, porque sabe lo mismo".

Sobre la citación de Rajoy, Hernando fue taxativo: lo que se busca es "montar un circo". Y "no vamos a contribuir a los circos, para eso están otros".

Según la petición cursada al tribunal por el PP, a tenor de "la legislación aplicable y las circunstancias concretas", la videoconferencia es "el medio que menos perjudica o perturba el ejercicio normal de su cargo como Presidente del Gobierno".

Mientras tanto, PP y PSOE pactaron las presidencias de las comisiones de investigación sobre el rescate bancario y la financiación de los populares, pero sin el acuerdo de C's y Podemos, que les acusaron de volver a "pastelear" para cubrirse las espaldas.

Los diputados de los dos partidos canarios fueron los consensuados por populares y socialistas para presidir estos órganos: Ana Oramas, de Coalición Canaria (CC), estará al frente de la comisión de financiación de las cajas, y Pedro Quevedo, de Nueva Canarias (NC), será el que dirija la comisión que va a investigar la financiación del PP.

Oramas y Quevedo percibirán 1.431 euros mensuales más cada uno por asumir esta nueva responsabilidad. Además, el de Quevedo es el voto que el PP necesita para aprobar los Presupuestos .

Por otra parte, el PSOE registró ayer en el Congreso una moción en la que reclama la reprobación del ministro de Justicia, Rafael Catalá; el fiscal general del Estado, José Manuel Maza, y el Fiscal Anticorrupción, Manuel Moix, por su presunta injerencia en el "caso Lezo".

La reprobación de Catalá, según los socialistas, es por "responsabilidad directa" en los nombramientos de Maza y Moix, cuya destitución también exigen.