La cerrada pugna verbal que desde hace semanas mantenían los números uno y dos de Podemos, Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, acabó ayer con el triunfo de las tesis tenidas por más duras, las "pablistas", las que más temen, también, el trabajo parlamentario. La candidatura encabezada por el senador Ramón Espinar, afín a Iglesias y que llevaba en su equipo a representantes de Anticapitalistas, derrotó a la de Rita Maestre, la "errejonista", en las primarias para elegir a la dirección autonómica.

Así las cosas, Espinar, portavoz del partido morado en el Senado, diputado en la Asamblea de Madrid y blanco de una fuerte controversia en las dos últimas semanas por la venta de un piso de protección oficial que adquirió en 2011, será el nuevo secretario general de Podemos en la comunidad y guiará a la organización en el mismo sentido en que Iglesias quiere conducirla a escala nacional.

El resultado de la votación, sin embargo, habla de una pugna muy cerrada con la candidatura de Maestre, portavoz del equipo de gobierno de Manuela Carmena en el Ayuntamiento de Madrid. Espinar ganó las primarias con un margen de sólo 2.000 votos: 13.686 sufragios (el 50,82%) frente a los 11.783 (43,75%) de su oponente.

La batalla de las primarias en Podemos Madrid ilustra el intenso debate en el que ha sumido al partido el fracaso de la búsqueda de un gobierno de las izquierdas y la resignación de tener que ejercer una tarea de oposición que Iglesias y Errejón no ven de la misma manera.

El "número dos" es partidario de que los morados no centren su labor de oposición en la movilización callejera, sino que aprovechen la estancia en las Cortes para prepararse para gobernar, mientras que los "pablistas" prefieren seguir agitando la bandera de la protesta para no caer en lo que Iglesias ha llamado en más de una ocasión "cretinismo parlamentario".

La victoria en Andalucía de Teresa Rodríguez puede leerse también como una victoria de las tesis del secretario general de Podemos. Rodríguez continuará al frente del partido en la comunidad al ganar con suma claridad las primarias: nada menos que un 75,64% de los votos (13.184) cosechó la dirigente andaluza, que seguirá disponiendo de mayoría absoluta en el Consejo Ciudadano de Podemos en la región.

Como en el caso de Madrid, el resultado de las primarias en Andalucía era interpretado ayer como una derrota del sector "errejonista", identificado en este caso con la candidatura de Begoña Gutiérrez, en la que también se integraba Sergio Pascual, el exsecretario de Organización de Podemos, que fue cesado de forma fulminante por Iglesias tras culparle de "deslealtad" tras las dimisiones en la dirección de Madrid, de las que le hizo personalmente responsable.

También en Extremadura se impuso en las primarias el candidato considerado más afín a Iglesias, Álvaro Jaén, que continuará liderando el partido en la comunidad y, que al igual que Espinar y Rodríguez, recibió la felicitación del secretario general del partido a través de la red social Twitter.

Sus victorias refuerzan los argumentos de quienes, como Anticapitalistas, plantearán en la futura Asamblea Ciudadana estatal (el nuevo Vistalegre) un modelo de organización que sea "menos partido y más movimiento popular". De hecho, el propio Iglesias admitió ayer que estos procesos de renovación interna son el anticipo de ese segundo gran cónclave del partido, en el que se pulsará la fuerza de su liderazgo y se marcará la hoja de ruta de la formación esta legislatura.

Tras su victoria en Madrid, Espinar dijo que había hablado con Maestre, con la que asegura que está de acuerdo en "construir un Podemos para ganar" en la región y "construir un movimiento popular y una alternativa al PP". Además concedió que Iglesias sale reforzado de las primarias, ya que ahora "Podemos es mucho más fuerte".