El concejal de Ahora Madrid Guillermo Zapata, juzgado por el tuit que publicó sobre Irene Villa en 2011, ha asegurado que nunca ha justificado el terrorismo, ha reiterado que su mensaje se enmarcó en un debate en la red sobre los límites del humor negro y ha dicho que los chistes no siempre tienen que ser graciosos.

"Han tenido que cerrar el cementerio de las niñas de Alcàsser para que no vaya Irene Villa a por repuestos", escribió en su día Zapata, para quien la asociación Dignidad y Justicia pide un año y ocho meses de cárcel por un delito de humillación a las víctimas.

¿Dónde está la gracia?, le ha preguntado el fiscal. Un chiste puede ser una mezcla de "angustia e hilaridad" y convertirse en un mecanismo de defensa, le ha respondido Zapata, que ha explicado que se trataba de un chiste que oía de pequeño en su barrio, quizá por la proximidad al lugar del atentado en el que Irene Villa perdió las dos piernas.

Tras varios sobreseimientos de la causa, Zapata se ha sentado en el banquillo de los acusados en una sala a la que han acudido víctimas del terrorismo, que han escuchado del concejal que en ningún momento quiso ofenderlas con el tuit que escribió en 2011.

De hecho, ha asegurado que siempre ha mantenido la misma opinión de respeto hacia las víctimas, aunque ha reconocido que no es lo mismo en abstracto que cuando ya se ha estado en contacto directo con alguna de ellas.

Zapata, como también han manifestado algunos testigos interrogados en la vista, ha enmarcado su tuit, así como el que escribió sobre los judíos, en un debate que se produjo en las redes sociales y en otros medios sobre las consecuencias del humor negro y los límites de la libertad de expresión.

La vista se celebra después de que el pasado 14 de septiembre la Sección Tercera de la Sala de Lo Penal ordenase por tercera vez al titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 Santiago Pedraz que sentase en el banquillo de los acusados a Zapata.

El magistrado instructor archivó las actuaciones el pasado mes de marzo al entender que al escribir dicho chiste no tenía intención de ofender a las víctimas y que era un comentario que se encontraba dentro de los límites de la libertad de expresión; sin embargo, la Sala concluyó en que sí existía material indiciario suficiente para juzgar al concejal.

La asociación de víctimas que preside Daniel Portero solicita una pena de 1 año y 8 meses de prisión para Zapata así como la inhabilitación absoluta por siete años al considerar que sus comentarios causaron además "gran alarma en la sociedad y entre los usuarios" de Twittter.

"Desafortunados comentarios"

"Han tenido que cerrar el cementerio de las niñas de Alcàsser para que no vaya Irene Villa a por repuestos", "¿Cómo meterías a cinco millones de judíos en un 600? En el cenicero", "Rajoy promete recuperar la economía y a Marta del Castillo" y "Los judíos son el mal, meme poderoso a la par que inútil. Grillo no lo peta por eso, pero es interesante", son algunos de los tuits que publicó en su cuenta.

En el mismo auto en el que fijan fecha, los magistrados que formarán el tribunal --Alfonso Guevara, Angeles Barreiro y Antonio Delgado-- admitieron, a petición de la defensa, la carta en la que la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) aceptaba las disculpas del concejal por sus "desafortunados comentarios".