El empresario y "cerebro" de la trama Púnica de corrupción, David Marjaliza, hizo regalos entre los años 2003 y 2007 a altos cargos y funcionarios públicos, entre ellos el exalcalde de Parla (Madrid) y exsecretario del PSOE madrileño Tomás Gómez, quien fue obsequiado con un cuadro, una cesta de Navidad y un televisor de 38 pulgadas, "megapanorámico" valorado en 4.999 euros. También recibieron regalos el exalcalde de Majadahonda Guillermo Ortega y el que fuera regidor de Boadilla del Monte Arturo González, ambos procesados en el juicio del "caso Gürtel".

Así consta en un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que obra en el sumario del "caso Púnica".

La Unidad Central Operativa asegura que estos obsequios se hacían con la intención de que posteriormente repercutieran sobre "los intereses empresariales" de Marjaliza y subraya que, en "buena parte de los casos", los destinatarios pertenecían a administraciones donde el "cerebro" de la trama fue beneficiado con contratos públicos.

En el mismo informa consta una nota en la que el otro cabecilla de la Púnica, el exconsejero del Partido Popular Francisco Granados, pregunta a Marjaliza, a quien llama "Morti": "Van 360.000 (no lo he contado, tú tienes máquina)".