Francisco Correa, considerado el cabecilla de la trama Gürtel, y su esposa, Carmen Rodríguez Quijano, se desmarcaron ayer de la mayoría de los acusados al no pedir la nulidad del procedimiento por la ilegalidad de las escuchas practicadas en prisión -que desencadenaron la condena del magistrado Baltasar Garzón- y de las grabaciones de José Luis Peñas que destaparon el caso.

Este desmarque de Correa se interpreta como una escenificación de la decisión de colaborar con la justicia de la que ha hecho gala en los días previos al juicio tras designar un nuevo abogado y pagar los 2,2 millones de euros que le reclaman como fianza civil.

Tampoco se adhirió a esas peticiones de nulidad el propio Peñas, exconcejal de Majadahonda, si bien planteó una cuestión propia de nulidad que centró en la ausencia de lectura previa de sus derechos constitucionales cuando compareció en 2009 ante el instructor que llevó el caso cuando Garzón lo derivó al Tribunal Superior de Justicia de Madrid, el fallecido Antonio Pedreira.

Siete de los acusados que ayer expusieron sus peticiones reclamaron al tribunal, por distintos motivos, permiso para ausentarse de las jornadas del juicio que no les afecten directamente, ya que la vista, destacó un abogado, puede durar "un año". Entre los peticionarios figura Álvaro Pérez Alonso, "El Bigotes", quien alegó "dolencias médicas". Uno de los incidentes más destacados de la sesión se produjo cuando el letrado del número dos de la trama, Pablo Crespo, pidió al tribunal imparcialidad después del "sambenito" que, aseguró, se les ha colgado a los acusados por parte de la opinión pública.

El presidente del tribunal, Ángel Hurtado, le cortó entonces de modo tajante: "Por ahí no, por ahí no continuamos", interrupción que repitió minutos después cuando Durán sacó a colación el incidente de recusación que presentó contra uno de los miembros del tribunal, José Ricardo de Prada, que no fue admitido a trámite. "Le vuelvo a interrumpir y no le permito que siga hablando", le cortó el magistrado, quien añadió que la fase de cuestiones previas no es la adecuada para este tipo de quejas.