El exdirector del área de Comunicación de Caja Madrid Juan Manuel Astorqui confesó ayer que se sintió presionado por el presidente de Ausbanc, Luis Pineda, cuando este alardeaba públicamente de que tenía contactos en un sector del Partido Popular de Madrid.

Astorqui denunció ante el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, que investiga a Ausbanc y a Manos Limpias por presuntos chantajes a bancos, que Pineda empezó a presionar a Caja Madrid después de que, en 1997, dejó de pagar un convenio de publicidad.

En ese momento, relató, puso en marcha varios mecanismos de extorsión, uno de ellos alardear de los contactos que tenía en el Partido Popular, que estaba en esos momentos en el poder en la Comunidad de Madrid.