El Juzgado de Instrucción Número 39 de Madrid decidió archivar la denuncia contra el empresario Javier López Madrid -involucrado en la operación Púnica e imputado por el escándalo de las tarjetas black- por presunto acoso sexual que interpuso la dermatóloga Elisa Pinto, y en cuya investigación se encontraron con mensajes reales de ánimo, cuya publicación ha generado la primera crisis de imagen de la nueva monarquía. La magistrada responsable de la instrucción del caso juzga que la acusación carece de "indicios suficientes" para continuar con el procedimiento judicial.

La médico había denunciado a López de Madrid asegurando que, tras una visita a su consulta, el empresario "comenzó un flirteo que ella trató de pararlo pero no pudo", según consta en la relación de la denuncia que aporta la sentencia. Tras estos episodios, según denunciaba Pinto, comenzó a padecer "acoso sexual" que "no pudo controlar" y "no denunció en un principio por ser la persona que era" y "por pánico", según relata el auto del juzgado de instrucción.

El documento recuerda que la dermatóloga había interpuesto también denuncias por amenazas recibidas en su teléfono móvil y a través de sus hijos y en 2014 fue apuñalada por la calle, hecho sobre el que responsabilizó al comisario de Policía José Villarejo, a quien ella vincula con López Madrid.

Pinto acusó López Madrid de seguirle y mandarle fotografías de los lugares en los que había estado, así como de presentarse en un hotel de París al que ella había acudido por motivos profesionales y acudir a su consulta sin cita previa, en una ocasión acompañado de un hombre que, según la denunciante, se trataría de Villarejo, y según el denunciado, su abogado Rafael Redondo.

López Madrid negó el acoso y aseguró que fue Pinto quien le acosó a él y a su familia, y que tanto él como sus amigos recibieron llamadas de contenido sexual, así como mensajes amenazantes, hechos por los que denunció a Pinto.

La publicación de los mensajes entre los Reyes y López Madrid generó la primera crisis de imagen en la nueva monarquía, especialmente implicada en su vocación de ejemplaridad. Tras la difusión del chat, distintos medios han publicado que Felipe y Letizia rompieron su relación con López Madrid una semana después del intercambio de mensajes, producido el 14 de octubre de 2014.

Los mensajes reales de ánimo fueron encontrados en el teléfono móvil de López Madrid al tener que entregar al juez su terminal a consecuencia de la denuncia presentada por Elisa Pinto. En ellos, la Reina Letizia se refiere al empresario como "compi yogui" -ambos compartían clases de yoga-, y en este chat la Reina le daba ánimos a raíz de una información periodística sobre sus gastos con las tarjetas opacas de Caja Madrid y la relación de estrecha amistad que López Madrid mantenía con el Rey desde sus tiempos de colegio.

Por otra parte, López Madrid parece tener los días contados como miembro del Patronato Princesa de Asturias. Fuentes de la Fundación indicaron que "si no se produce ningún cambio antes" del 30 de marzo, en esa fecha y fuera del orden del día, el Patronato de la Fundación, el verdadero órgano de gobierno de la entidad, abordará el caso de López Madrid. El mencionado "cambio" que evitaría que el asunto fuera tratado sería, evidentemente, la renuncia por iniciativa propia del controvertido empresario, presidente de la compañía Siacapital y yerno de Juan Miguel Villar Mir, presidente de OHL.