El exportavoz de la disuelta Batasuna Arnaldo Otegi, actual secretario general de la formación abertzale Sortu, se proclamó ayer ejemplo de que en España sigue habiendo presos políticos. "Hoy sale, como en otras muchas ocasiones, un preso político de una cárcel española", dijo Otegi al abandonar la cárcel de Logroño, tras cumplir una pena de seis años y medio por intentar reconstruir Batasuna.

Otegi, aguardado a las puertas de la prisión por unas 300 personas, se dirigió a su domicilio, en Elgoibar (Guipúzcoa). "Estoy muy contento de estar en casa y a ver si nos traemos a todos los presos a casa", afirmó en euskera a las puertas de su domicilio.

Otegi ha sido acogido con dos homenajes: uno, ayer, en Elgoibar, y otro, este sábado en el velódromo donostiarra de Anoeta. Pero también ha generado una discusión jurídica sobre su intención de presentarse como candidato de Sortu a lehendakari en las autonómicas de 2017, ya que pesa sobre él hasta 2021 una pena de inhabilitación.

Los líderes de Podemos, Pablo Iglesias, y de Ciudadanos, Albert Rivera, se han enzarzaron en un rifirrafe en Twitter a cuenta de la excarcelación de Otegi, después de que el secretario general del partido morado haya celebrado su salida de prisión. Iglesias al presidente de Ciudadanos, al que ha reprochado que no condenara el franquismo en el Parlament.

"Menos lobos Albert Rivera, que os salisteis del Parlament con el PP para no condenar el franquismo. Nosotros principios, vosotros marketing", señaló Pablo Iglesias en un tuit contestado a Albert Rivera, quien afeó al líder de Podemos que lo considerara un encarcelado "por ideas" y sostuvo que quien sí está preso por ideas es el líder opositor venezolano Leopoldo López.