Diego Torres no quiso desaprovechar la jornada de ayer sin vincular de nuevo a la Casa del Rey con el escándalo. Esta vez se centró en el asesor legal del monarca, el conde de Fontao, al que en 2006 envió para que hablara con Urdangarín y le aconsejara que dejara Nóos. "No es cierto que José Manuel Romero viniera un día y nos dijera que Urdangarín tenía que dejar Nóos. Fueron muchos días de reuniones antes de tomar una decisión. Yo también era partidario de que abandonara el proyecto porque las críticas sobre los negocios me perjudicaban".Torres insistió en nombrar al conde de Fontao que aseguró que fue este quien autorizó que Urdangarín creara una nueva fundación para sus proyectos relacionados con el deporte.