La presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre, protagonizó ayer una esperada comparecencia después de sus malos resultados en las elecciones del domingo, que, con toda probabilidad le impedirán ser la sucesora de Ana Botella en la Alcaldía de Madrid. Aguirre reclamó una "refundación" del PP y aseguró que será ella misma quien la comience con la convocatoria de un congreso extraordinario del PP madrileño después de que se constituyan las instituciones.

"Me propongo llegar al fondo de la regeneración. El PP requiere una refundación", declaró en una multitudinaria rueda de prensa. Aguirre quiere llevar la refundación a cabo "con los militantes actuales y con los que sientan el espíritu reformador liberal". "Por mi parte no habrá limitaciones a esos cambios y reformas que emprenderemos", aseguró.

Preguntada por si ella misma se presentará en ese congreso como candidata a seguir presidiendo el partido en Madrid, Aguirre echó balones fuera. "Aún no se ha convocado. Esto llegará en otro momento, como dijo Cristina Cifuentes", remachó. Lo que sí quiso dejar claro fue su declarada intención de no aferrarse a nada. "Yo jamás me he aferrado a los cargos", manifestó. "Dije que si era alcaldesa no me presentaría al próximo congreso. Cuando llegue el momento de ese congreso extraordinario... todo se va a discutir", apuntó.

"No enmascarar"

Aguirre comenzó su intervención analizando los resultados de las elecciones del domingo, en las que reconoció que el PP de Madrid perdió 193.000 votantes con respecto a cuatro años atrás, lo que supone un 25 por ciento menos de votos. "Son resultados malos que no vamos a disimular ni enmascarar y van a ser un acicate para acometer en el partido todas las reformas y cambios que sean necesarios", declaró.

Tampoco esquivó Aguirre la pregunta sobre los 5.000 votos más que Cifuentes consiguió en la capital. "No es la primera vez que sucede. En el Ayuntamiento llevamos mucho tiempo perdiendo votos", concedió, tras recordar que esa misma situación se dio cuando ella se presentó a la Presidencia de la Comunidad y Alberto Ruiz-Gallardón a la Alcaldía, y ella obtenía más votos en Madrid que los conseguidos por él.