Los dos últimos inmigrantes de origen subsahariano que permanecían en lo alto de la valla de Melilla han descendido después de pasar más de 10 horas encaramados a una altura de seis metros, según han informado a Efe fuentes policiales.

El resto de los casi 30 inmigrantes que se habían subido a las 9.00 horas al vallado, tras protagonizar junto a otros 150 subsaharianos un intento de entrada masivo a Melilla, se han ido bajando a lo largo de la tarde.

La mayor parte del grupo decidía bajarse en torno a las 15.00 horas y volver a Marruecos, aunque antes ya lo había hecho uno de ellos voluntariamente, y otro había sido rescatado tras sufrir una lipotimia, por la que fue trasladado al Hospital Comarcal.

Visiblemente cansados, con los músculos entumecidos, los subsaharianos ponían fin a una aventura de muchas horas, que comenzaron con fuerza, coreando gritos de "Libertad, libertad" y "España, España".

El intento de entrada se ha producido por la zona norte del perímetro, junto a los Pinares de Rostrogordo y los cortados de Aguadú.