La ministra de Defensa, Carme Chacón, detalló hoy la oferta de su Departamento para hacerse cargo del 25 por ciento del coste de la protección por empresas de seguridad privada de los atuneros españoles que faenan en el Océano Indico, incluyendo la formación y el traslado de los vigilantes.

En respuesta a una interpelación planteada por el diputado del PP Arsenio Fernández de Mesa, la ministra puntualizó que este 25 por ciento de Defensa se suma al 25 por ciento del que se hará cargo el Gobierno vasco, para así entre ambas instituciones llegar a cubrir la mitad del coste de esta protección privada, que será posible en unos días, después de que el Consejo de Ministros apruebe la modificación del Reglamento de Seguridad Privada.

Chacón recordó que en la Operación Atalanta contra la piratería se han utilizado tres buques de guerra, un petrolero de apoyo a la flota, siete helicópteros y un avión de ayuda marítima. Agregó que han participado 845 militares españoles en las sucesivas rotaciones militares, que los buques acumulan 370 días de mar y los aviones 1.400 horas de vuelo. Aprovechó para destacar que ayer un helicóptero de la fragata Canarias junto a un buque alemán apresaron a siete piratas.

Además, detalló que España ha desarrollado operaciones específicas, como haber promovido el desplazamiento al sur del dispositivo militar en la zona para que estén lo más cerca posible de nuestros posibles, y haber solicitado la prórroga por un año de la Atalanta, entre otras.

Se reducen los ataques

"Sumamos también a la OTAN y a terceros países en este dispositivo naval puesto en marcha por voluntad de España y Francia. Se ha reducido a la mitad el número de ataques que acaban en secuestro al haber mejores instrumentos de alerta y coordinación. Se han producido 135 ataques y hasta 49 de ellos han finalizado en secuestro. A buques de Francia, Malta, Alemania, Grecia, Holanda, Bélgica o Italia les ha sucedido lo que ahora a España con el Alakrana", explicó.

Eso sí, insistió en la gravedad de la situación pues, según informaciones de última hora, esta misma mañana permanecían secuestrados un total de nueve buques con banderas tan diversas como Taiwan, Reino Unido, Malta, Antigua y Barbuda, Singapur y China, apresados todos ellos por "distintos clanes piratas".

Para la ministra, está "más que acreditado el compromiso y esfuerzo incansable del Gobierno para mejorar la seguridad" de los pesqueros españoles en esas aguas. Añadió que Gobierno y Armada han "hecho su trabajo" deteniendo a dos de estos piratas y poniéndolos a disposición de la Audiencia Nacional, si bien matizó que a partir de ahí ya son los "tribunales los que tienen que hacer su trabajo".

Chacón recalcó que este es un problema de toda la comunidad internacional, a pesar de que el líder del PP, Mariano Rajoy, "dijera que estas cosas sólo le pasan a España", algo que demuestra un "gran desconocimiento". "Ningún país puede hacer frente en solitario a un problema como este. Actualmente son 42 elementos militares de 24 países, los que están desplegados en la zona para dar una seguridad que no puede ser completa", recalcó.

En paralelo a los trabajos conjuntos con la comunidad internacional, destacó las reuniones constantes que Defensa ha mantenido con los armadores, "con los que se han hecho iniciativas complementarias". Además, puntualizó que la Atalanta ha permitido que "los elementos españoles se dediquen en exclusiva a la protección de los atuneros españoles".

Por todo ello, consideró "grave" que un partido que desea ser alternativa --el PP-- apoye embarcar militares para proteger los buques, ya que esto no tiene cabida en la legislación española y "plantea dudas en la legislación internacional". A este respecto recordó que el JEMAD dice que es una "opción inviable desde el punto de vista operativo", y dijo que "por eso de los 27 países de la UE, sólo uno --Francia-- lo usa, mientras el resto prefiere seguridad privada".

Si hay que matar, quien lo asumirá

Sin embargo, el PP insistió hoy en su apuesta por embarcar infantes de Marina en los atuneros, máxime cuando, según recordó Fernández de Mesa, los armadores se habían comprometido a pagar cien por cien (traslados y dietas incluidos).

Además, el portavoz adjunto de Defensa del Grupo Popular avisó de que hay un problema con los civiles armados, a los que tildó incluso de "mercenarios", y es que la legislación internacional no les concede autoridad para efectuar detenciones, tarea reservada para los militares.

"*Qué autoridad internacional van a tener? Si desgraciadamente llega el momento de matar a alguien, *quién se va a hacer responsable? --se preguntó--. Van a tener muchos problemas para explicar su situación".

Según explicó, el PP está cumpliendo con su obligación a la hora de pedir mayor implicación del Ministerio y de hecho destacó que, de los nueve barcos que hoy permanecían secuestrados, ninguno es francés, el país que embarca militares en los pesqueros. "Yo quiero que los resultados de mi Gobierno sean igual de buenos que el del mejor --proclamó--. Esto no admite demoras ni mirar a otro lado, y ya le digo que de palmeros no haremos".

La ministra replicó que, después de su "catarata" de datos, no se explica la actitud del PP, que en su opinión aborda este tema "como si tuviera las soluciones y los 24 países que forman parte de la Operación Atalanta fueran unos incompetentes. "Por una vez, estén con el Gobierno en el mayor reto en el mar que tiene la comunidad internacional en el siglo XXI", concluyó.