La celebración del Aberri Eguna (Día de la Patria Vasca) ha venido acompañada hoy de una declaración de ETA, publicada a través del diario Gara, en la cual la banda niega legitimidad democrática al nuevo Gobierno que formará previsiblemente Patxi López después de ser investido lehendakari, y lo sitúa en su punto de mira.

El comunicado de ETA ha originado una cascada de reacciones en su contra por parte del conjunto del arco parlamentario vasco, una parte del cual ha intercalado sus respuestas a ETA durante los actos organizados para festejar el Aberri Eguna.

El lehendakari en funciones, Juan José Ibarretxe, que ha tomado parte en el mitin del PNV en Bilbao, ha advertido de que "por una patria se puede morir, pero no se puede matar" y ha recordado a ETA que "no pinta nada" y "sobra en nuestra sociedad y en nuestras vidas".

Por su parte, el portavoz del PSE-EE en el Parlamento Vasco, José Antonio Pastor, ha dicho que si para ETA, el Gobierno Vasco de López es un objetivo "prioritario", para el nuevo gabinete liderado por el PSE-EE, la "prioridad" será la lucha contra ETA.

El portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, ha advertido de que hay que tener "cuidado" y estar con la "guardia muy alta" ante ETA y ha opinado que lo importante ante ETA "es tener las cosas claras y decirles que pierdan toda esperanza, ya que el Estado de Derecho no va a retroceder ni un solo milímetro y que a todos los demócratas nos van a tener enfrente con toda la determinación".

Desde el PP vasco, su presidente, Antonio Basagoiti, ha afirmado que "es más importante que nunca llevar adelante el cambio que estamos negociando socialistas y populares, porque ese cambio tiene como objetivo acabar con el terrorismo de una vez por todas, acabar con sus justificaciones y acabar con su siembra de fanatismo".

Asimismo, ha pedido al PNV que modere sus críticas hacia PSE y PP porque puede suponer que ETA les ponga "aún más en el punto de mira".

Desde Aralar, formación que es acusada por ETA en su comunicado de haber crecido electoralmente aprovechándose de la ilegalización de la izquierda abertzale, su vicecoordinador general, Jon Abril, ha pedido a ETA que abandone las armas y que deje a los políticos hacer política.

El vicepresidente de Eusko Alkartasuna, Koldo Amezketa, ha exigido a la banda terrorista ETA que "firme su acta de resolución cuanto antes" en lugar de "amenazar y pretender condicionar la vida política" y le ha advertido de que la sociedad vasca "no necesita que le digan cuál es el camino; lo sabemos perfectamente".

El coordinador general de EB, Mikel Arana, ha recordado a ETA "que no tiene ninguna legitimidad para dirigirse a la sociedad vasca" y ha advertido de que "la oposición al nuevo Gobierno Vasco corresponde exclusivamente a las formaciones políticas, y debe ser expresada por cauces exclusivamente políticos y democráticos".