Se sentarán de nuevo. Les haremos sentarse de nuevo para reconocer los derechos de Euskal Herria de una vez por todas", esta es la amenaza que ETA lanza en su último comunicado publicado, como suele ser habitual, en las páginas del diario "Gara". Un comunicado en el que, además, la banda terrorista reivindica diez atentados, incluido el último el pasado jueves en el campus de la Universidad de Navarra en Pamplona, en el que también avisa al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que sus predecesores también intentaron acabar con la izquierda abertzale a base de ilegalizaciones y detenciones y no lo consiguieron. A su juicio, para poder llegar a una solución del conflicto vasco hay que volver a la la Declaración de Lizarra-Garazi.

En un comunicado de cinco folios íntegros en euskera, ETA asume la autoría de hasta diez ataques con bomba llevados a cabo en los últimos meses. Entre ellos está el atentado perpetrado el pasado 30 de octubre contra la Universidad de Navarra contra "el enemigo de Euskal Herria que es el Opus Dei" y el llevado a cabo con coche-bomba el 22 de septiembre contra el acuartelamiento de Santoña (Cantabria), que provocó la muerte al brigada Luis Conde. Además, asume los ataques del pasado 29 de julio en Torremolinos, el 17 de agosto en Benalmádena, Guardamar y Málaga, "contra los intereses económicos y turísticos españoles", así como la bomba-lapa colocada en el vehículo de un policía nacional el 16 de septiembre en Basauri (Vizcaya) y que no llegó a estallar.

También reconoce la colocación de un coche-bomba en la sede de Caja Vital en Vitoria, un ataque que no argumenta, el atentado contra la comisaría de la Ertzaintza del 21 de septiembre en Ondarroa, y el del 4 de octubre en Tolosa "contra el aparato de justicia español". Estos actos son para la banda terrorista un llamamiento a la población para que se aleje de las sedes y cuarteles de los "enemigos", entre las que incluye las comisarías de la Ertzaintza, a la que califica de "Policía autonómica de España".

Pero ETA no sólo habla de sus atentados, ya que en el texto también amenazan al Gobierno con imponerles la negociación. "Se sentarán de nuevo. Les haremos sentarse de nuevo para reconocer los derechos de Euskal Herria de una vez por todas", insiste, al tiempo que destaca que no se quedará "cruzada de brazos ante el ataque terrorista global a Euskal Herria", señalan. Y es que, a su entender, los Estados español y francés "siguen dando pasos en su apuesta represiva" y que, para "aplastar a Euskal Herria", se basan en "ideologías fascistas por las que todos los independentistas son de ETA".

Del mismo modo, la banda califica de "estratega represor" al ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, al que acusa de querer "profundizar el camino contra el movimiento para la liberación de la nación vasca" con operaciones policiales, detenciones y "torturas".