La explosión de la bomba, colocada en las cercanías del hotel Sol Aloha Puerto bajo un puente peatonal situado en la playa, que no resultó afectado por la deflagración, provocó aturdimiento a un joven turista de unos 16 años.
No hubo previo aviso de la colocación del artefacto, que era de escasa potencia y que, según pudo comprobar Efe, provocó un agujero de aproximadamente un metro de diámetro y 40 centímetros de profundidad.
En el momento de la explosión había personas en el paseo marítimo, sin embargo no se registraron víctimas ni daños de consideración.
La detonación causó sobresalto en gran número de turistas alojados en hoteles próximos al paseo marítimo, aunque no fue necesario desalojarlos.
Al lugar suceso se han trasladado el delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, y el comisario Provincial de Policía, Juan Jesús Peñalver.
El hotel Sol Aloha Puerto, el más cercano al lugar de la explosión, se encuentra esta noche al 90 por ciento de ocupación, unas 800 personas, en su mayoría españoles, aunque también hay un gran número de turistas británicos.
La Policía Nacional, que acordonó la zona, investiga los hechos, que por el momento no han sido asumidos por ninguna persona o grupo.
En las investigaciones derivadas del reciente desmantelamiento del "complejo Vizcaya" de ETA se descubrió la intención de la banda terrorista de llevar a cabo una campaña de atentados en Andalucía.
La de esta madrugada, es la quinta bomba que explota en las playas españolas este verano contra tres nucleos turísticos del país.
