El duodécimo congreso del PP del País Vasco, que hoy elegirá a Antonio Basagoiti como nuevo presidente de esta formación, comenzó ayer en Bilbao con llamamientos a la unidad del partido y a no prescindir de nadie en el mismo y con reconocimientos a la labor de la presidenta saliente, María San Gil, la gran ausente del cónclave, al que tampoco asistió Jaime Mayor Oreja.

Este congreso, al que asisten 400 delegados de todo el País Vasco y al que sólo se ha presentado la candidatura del líder de los populares vizcaínos, Antonio Basaogoiti, a presidente de la formación, se celebra este fin de semana en la capital vizcaína tras dimitir del cargo hace mes y medio su presidenta, María San Gil, en desacuerdo con la estrategia política de la nueva dirección nacional del PP encabezada por Mariano Rajoy.

En la sesión inicial intervinieron ante los compromisarios la nueva secretaria general del PP, Maria Dolores de Cospedal; el ex presidente del PP vasco y eurodiputado Carlos Iturgaiz, la secretaria de organización del PP, Ana Mato, y el secretario general del PP vasco, Carmelo Barrio. Todos tuvieron palabras de recuerdo y homenaje para el concejal de Ermua asesinado por ETA Miguel Ángel Blanco, cuyo undécimo aniversario se cumple hoy.

María Dolores de Cospedal fue la encargada de abrir la cita congresual adelantada de los populares vascos con un llamamiento a la unidad del partido en el que dijo: "Todos somos esenciales, todos somos importantes y todos hacemos falta".

La secretaria general del PP habló también de la consulta convocada por el lehendakari Ibarretxe, que calificó de "nuevo desafío a la soberanía nacional y a la democracia" que, dijo, desde el PP "no vamos a consentir".

De Cospedal se refirió también a la situación política en el País Vasco y manifestó, en este sentido, que "el PP tiene bien claro que es posible un País Vasco sin un gobierno nacionalista".

Recuerdo

A continuación intervino precisamente Carlos Iturgaiz quien, al igual que posteriormente lo hizo el secretario general saliente, Carmelo Barrio, defendió la figura y la labor de María San Gil y la estrategia política desarrollada por este partido en el País Vasco bajo su mandato y el de Mayor Oreja.

Carmelo Barrio cerró el turno de intervenciones con la defensa de la gestión de la ejecutiva saliente aunque primero hizo una "una mención y un agradecimiento muy especial" a María San Gil, reconocimiento que, precisó, "no se trata de un homenaje, sino la constatación de una verdad" y que fue recibido con una gran y prolongada ovación por los asistentes.

Barrio aseguró: "Para mí, María San Gil es lo mejor que hemos tenido en el partido en toda su historia".