Frente a esta situación, el líder de los populares puso a su formación como una garantía frente a los tiempos difíciles: "El PP sí que sabe enfrentarse a una crisis". Además, Rajoy subrayó la legitimidad de su cargo, resaltando que es presidente del PP "porque lo habéis querido, no me ha puesto ninguna multinacional, ningún sindicato y ninguna organización".

En la jornada de cierre del XVI Congreso Nacional del partido y ante la plana mayor de la formación, Rajoy aseguró que "España necesita al PP" y para ello, debe llevar a cabo una labor de oposición "tenaz y constructiva" con el objetivo de convertirse en una "alternativa" y llegar al Palacio de La Moncloa para gobernar, frente al Ejecutivo de Zapatero que ha dado estos días "ejemplos de desgobierno". Así, destacó que antes de las elecciones el presidente aseguraba que se estaba "en jauja", algo que "muchos creyeron".

Pero tras los comicios, continuó, "llegó la cruda realidad y se acabaron los disimulos", no porque el Gobierno "confesara la verdad" sino porque ya "no podía ocultar lo que pasaba". Según Rajoy, la situación económica es "mucho peor que complicada" porque los españoles "sufren" la subida de la luz, de los precios de los alimentos, de los combustibles o de las hipotecas y todos los indicadores económicos apuntan a una crisis que Zapatero "aún se empeña en negar o en minusvalorar para camuflar su clarísima irresponsabilidad y pasividad".

"Ya no es posible contarles la historia de la 'Champion League' de la economía. Se nos dijo que vivíamos en el mejor de los mundos y ahora estamos pagando la desidia del Gobierno de los últimos años", remachó Rajoy, que consideró que está "muy bien" buscar un acuerdo con la patronal y sindicatos pero el Gobierno tiene la "responsabilidad de gobernar, establecer el diagnóstico correcto y tomar medidas adecuadas". "Esa responsabilidad es indelegable y para eso están en el Gobierno", subrayó.

"Es un gobierno timorato, lo suyo es dejarse querer, no meterse en líos, quedar bien. \u00A1Si ni siquiera se atreve a decir la verdad, cómo se va a atrever a tomar medidas! Lo peor no es que no sabe qué hacer", denunció Rajoy, que garantizó que "el PP sí que sabe enfrentarse a una crisis" y por eso hará lo que esté en su mano "para que el Gobierno se equivoque lo menos posible". Con este fin, exigirá a Zapatero que "diga la verdad" y genere confianza, y le pedirá también "disciplina" porque no se puede pedir a los ciudadanos que se "aprieten el cinturón" y él "haga lo contrario".

LA HERENCIA DE ZAPATERO

Además, señaló que el Gobierno tampoco reconoce los problemas que ha creado con el agua, las "tensiones nacionalistas", haber puesto en "peligro" el patrimonio del castellano o la inmigración. "La herencia es suya", exclamó, y ya "no le queda ni el refugio de la palabrería" porque "no basta con vender humo". Por eso, reiteró que España "necesita al PP", que, según dijo, quiere que todos los españoles sean iguales y defiende el Estado de las Autonomías, rechazando los "juegos confederales" y los "desplantes secesionistas". "Nosotros decimos lo mismo en todas partes, no somos mutantes ni hacemos el camaleón", apuntó.

En cuanto a la política antiterrorista, Rajoy aseguró que "parece" que el Gobierno "ha rectificado" en su conducta y, como el PP "no juzga las intenciones, sino los hechos", avanzó que apoyará las medidas que adopte para acabar con ETA. No obstante, dijo que el PP estará "vigilante" y será "exigente" para que el Gobierno "no vuelva a las andadas y no vuelta a cometer los errores del pasado". También se comprometió a estar "siempre al lado de las víctimas", recordándolas permanentemente. "Siempre con las víctimas del terrorismo", proclamó, recibiendo un fuerte aplauso.

Además, Rajoy dio las gracias los compromisarios por haberle reelegido como presidente del PP. "Estoy aquí porque vosotros lo habéis querido, no me ha puesto ninguna multinacional, ningún sindicato y ninguna organización que no sea el PP. Estoy aquí porque lo habéis dicho vosotros", proclamó. "Es verdad que hemos pasado a veces sin sabores, pero justos, y sabiendo que era el precio a pagar por ser fiel a nuestras convicciones y valores. Y por eso, vistos en la distancia, hasta los sinsabores han valido la pena", resaltó. "El PP ya está en la final y además la va a ganar", afirmó Rajoy que envió a todos los asistentes a sus casas a animar a la Selección para concluir con un "viva España".