Todos los partidos minoritarios del Congreso mantuvieron hoy la misma postura ante la investidura de José Luis Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno que ya expresaron en la primera votación, que tuvo lugar el pasado martes, de forma que los dos diputados del BNG volvieron a abstenerse.
El portavoz del BNG en el Congreso, Francisco Jorquera, advirtió a Zapatero de que había equivocado su estrategia al no buscar acuerdos para salir investido con un mayor respaldo. "No hubiera sido someterse a hipotecas, sino demostrar capacidad de dialogo y colaboración", le espetó, para reiterar a continuación las reivindicaciones de los nacionalistas gallegos, que calificó como "razonables".
El Bloque planteó en las negociaciones con el PSOE la necesidad de reformar el sistema de voto emigrante para garantizar su limpieza, así como acabar con "las trabas" al sector naval gallego y recuperar para la construcción naval civil el astillero de Navantia Fene.
Los nacionalistas gallegos también demandaron reforzar el autogobierno en Galicia completando el mapa competencial reconocido en el Estatuto vigente y con la asunción de otras competencias nuevas a través de fórmulas concertadas o de delegación del Estado en asuntos como salvamento marítimo, gestión de los aeropuertos y puertos, o tráfico y seguridad vial.
Asimismo, reclamaron un nuevo sistema de financiación autonómica que apueste por la responsabilidad fiscal plena, por la territorialización de los tributos y la creación de una Agencia Tributaria propia.
