El socialista José Bono fue elegido ayer presidente del Congreso de la novena legislatura, en una sesión plenaria en la que fue necesaria una segunda votación para ese cargo debido a que los diputados de los diversos partidos nacionalistas le negaron su apoyo. Bono, que se ha convertido así en el primer presidente del Congreso en la etapa democrática que no ha sido elegido en primera vuelta y que ha tenido que recurrir a una segunda ronda para pasar el corte con mayoría simple, se comprometió en su primera intervención como tercera autoridad del Estado a atender a todos por igual, especialmente a las minorías, y a apostar por la moderación.

"En ser justo es en lo que comprometo el honor que hoy me otorgan", subrayó Bono en un discurso con el que ha dado por constituida la Cámara Baja y en el que aseguró que la diversidad es un hecho, "pero la igualdad es el derecho principal".

A las 10.00 horas de la mañana comenzó la sesión constitutiva del Congreso con la composición de la Mesa de Edad. A continuación, se procedió a la elección del presidente del Congreso, para lo que los diputados fueron llamados uno por uno para depositar su voto -secreto- en una urna cerrada. Aunque Bono era, en principio, el único candidato a la Presidencia de la Cámara, por la mañana el PP había comunicado su intención de presentar a una candidata alternativa, Ana Pastor. Así, en la primera votación, en la que se requiere una mayoría absoluta (176 votos), Bono se tuvo que conformar con 168 apoyos, un escaño menos de los que tiene el PSOE, mientras que Pastor obtuvo 152 apoyos, dos votos menos que escaños tiene el Grupo Popular.

En la segunda ronda, ya con mayoría simple, Bono recabó 170 votos, pero aún así, no fueron todos los del PSOE, ya que hay que contar entre ellos los de los dos representantes de Coalición Canaria y el líder de IU, Gaspar Llamazares. En cualquier caso, no resulta posible conocer quiénes protagonizaron esa "fuga de votos", aunque se desataron todo tipo de especulaciones sobre quién había podido ser. Inmediatamente se apuntó a Alfonso Guerra, que consideraba que había otros candidatos mejores que Bono para presidir el Congreso, pero a su salida dio a entender a los periodistas que había votado a favor.

Tampoco Ana Pastor logró todos los votos de su partido, ya que logró 152 de los 154 que tiene el PP. En cualquier caso, Bono se convirtió en el primer presidente del Congreso de los Diputados que obtiene el asiento en una segunda votación y no por mayoría absoluta, como sus siete antecesores, además de ser el que menos apoyos ha obtenido.

En cuanto a los secretarios, el más votado fue el socialista Javier Barrero, que ya formó parte de la mesa en la legislatura pasada y que volverá a ser secretario primero de la Mesa del Congreso. El segundo puesto fue para el guipuzcoano José Ramón Beloki, del PNV, y los dos últimos cargos en la Secretaría fueron para los populares Ignacio Gil Lázaro y Celia Villalobos.

Bono pronunció a continuación su primer discurso ante el Congreso de los Diputados, el cual comenzó agradeciendo su voto a los diputados que le respaldaron para ser presidente y recalcó que aquellas papeletas que no contenían su nombre le sirven de motivación "para intentar ganar la confianza" de los que hoy no le han dado su apoyo. "El deber del presidente empieza por serlo de todos, cualquiera que haya sido la confianza que le han otorgado y en atender con solicitud a todos por igual, especialmente a las minorías. En ser justo es en lo que comprometo el honor que hoy me otorgan", apostilló.

El Congreso fijó para el martes 8 de abril el inicio de la sesión de investidura de José Luis Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno. Este era el primer día en que podía comenzar el proceso para nombrar al presidente.

Pastor: "Esperemos que haya más tranquilidad"

La recién nombrada vicepresidenta segunda del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, consideró ayer que "no hay dos legislaturas iguales" y confió en que esta "nueva singladura", que acaba de comenzar, sea más tranquila que el periodo de cuatro años que acaba de concluir.

Al abandonar el hemiciclo, ya constituida la Cámara Baja, Pastor explicó que se sentía "muy contenta y muy satisfecha" por haber sido elegida vicepresidenta segunda del Congreso.

Preguntada por si en esta legislatura se recuperará la tranquilidad que faltó en la anterior, Pastor indicó que comenzará a trabajar para ello representando a todos los españoles desde el papel que ocupa en el Gobierno de la Cámara. También se refirió a las votaciones para designar al presidente de la Cámara, en las que fue la candidata propuesta por el PP y en las que recibió 152 votos, dos menos de los 154 que suma su grupo. Ante este hecho, afirmó que algún diputado popular podría haberse "confundido" entre las tres papeletas que había con su nombre.