La posibilidad de sentar en el banquillo de los acusados del Tribunal Penal Internacional de La Haya a los protagonistas de la foto de las Azores, incluyendo al ex presidente Aznar, se ha convertido, en cuestión de días, en una posibilidad que gana enteros entre los partidos políticos españoles que se opusieron a la guerra. El debate cobró fuerza ayer con un artículo de opinión del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, publicado en El País, en el que el magistrado pide que se profundice sobre la "eventual responsabilidad penal" de Aznar por la guerra.

El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, afirmó que él, personalmente, se "apunta" a un hipotético proceso "si hay razones desde el punto de vista del derecho". Mientras, el portavoz del PP, Eduardo Zaplana, consideró la petición "desorbitada".

El grito de "Aznar, canalla, nos vemos en La Haya" pudo oírse en la manifestación del sábado contra la guerra de Irak en Madrid, y sólo IU se había atrevido a sacarlo a colación, aunque más bien con la boca pequeña, como conscientes de que la demanda no tenía mucho recorrido. Sin embargo, el domingo, el fiscal jefe de la Corte Penal Internacional, el argentino Luis Moreno Ocampo, aseguró estar dispuesto a dirigir una investigación para juzgar a Bush y Blair por los crímenes cometidos en Irak, siempre que los países árabes, y en especial Irak, reconozcan al TPI y presenten la denuncia.