Cuando se cumplen 78 días del atentado terrorista, que causó la muerte a los ciudadanos ecuatorianos Diego Armando Estacio y Carlos Alonso Palate, los trabajadores de la empresa Dragados han demolido toda la superficie prevista del módulo D, y sólo falta por derribar una pequeña zona del módulo C, anexa al anterior, que resultó muy afectada por la explosión.

La empresa encargada de las obras ha mantenido la parte posterior del módulo D, donde se ubican las rampas de acceso a las distintas plantas del aparcamiento.

Decenas de trabajadores de Dragados trabajan desde hace varios días en el encofrado necesario para el forjado de la primera planta, para lo que han colocado numerosas plataformas con ruedas y han apilado material.

El atentado perpetrado el pasado 30 de diciembre en el aparcamiento del aeropuerto de Barajas destrozó el 70 por ciento del módulo D, de cinco plantas y unos 50.000 metros cuadrados, mientras que un 30 por ciento quedó en pié con graves daños y tuvo que ser demolido.

AENA prevé que el citado módulo, de los seis con que cuenta el aparcamiento, vuelva a funcionar el próximo mes de septiembre, tras una inversión de 24,5 millones de euros en su reconstrucción, que fue adjudicada a la empresa Dragados.