Zapatero, tras las intervenciones de los grupos parlamentarios, intervino ante el pleno del Congreso que ratificará definitivamente "una ley de plena ciudadanía, para todos," que pretende, en primer lugar, "hacer justicia a las mujeres" y "derogar cualquier dominación de los ciudadanos", manifestó.
Tras señalar que esta ley, junto a la de dependencia, "podrían justificar toda una legislatura", repasó las medidas de la norma y destacó en concreto la incorporación de las mujeres a los consejos de administración, "que originarán, sin duda alguna, un mejor funcionamiento de nuestras grandes corporaciones mercantiles".
Se trata, dijo, de una norma "ambiciosa" que exigirá un esfuerzo para hacerla efectiva, por lo que encargará un seguimiento constante del cumplimiento de todas las medidas, que abarcan desde el empleo y la formación, hasta el reparto de las cargas familiares, la paridad en las listas electorales o la presencia equilibrada de sexos en los puestos decisorios.
El presidente del Gobierno recordó que, a pesar de que la Constitución consagra la plena igualdad, los datos de mujeres en cargos de responsabilidad son "pertinazmente elocuentes" y demuestran que a la sociedad española "le falta un buen trecho" para cumplir ese objetivo.
Zapatero dedicó "este 15 de marzo de 2007" a Clara Campoamor, la diputada que defendió el voto femenino hace 75 años, a las mujeres "que se quedaron en el camino, a todas aquellas a las que la historia quiso robarles los sueños y a las que no saben todavía que esa libertad plasmada en el derecho a ser ciudadanos, también les pertenece".
A su juicio, hoy se hace realidad el deseo de Campoamor, que decía que trabajaba "para que en este país los hombres encuentren a las mujeres en todas partes, y no sólo donde ellos vayan a buscarlas".
Se mostró así "profundamente orgulloso" de pertenecer a un grupo y a un gobierno que ha impulsado "una ley tan hermosa para la igualdad".
Pero subrayó que el mérito no es sólo del Ejecutivo y reconoció la labor de las asociaciones de mujeres y de quienes han logrado convencer a los hombres de que lo que pedían no sólo era justo, sino "imprescindible para ganar en nuestra propia estima y dignidad".
Para el Gobierno, insistió, "hoy es uno de los días más importantes de la legislatura", pues se aprueba una de las normas más comprometidas con la igualdad de las que se conocen en el mundo y se avanza hacia "una convivencia más solidaria y más justa".
Aprovechó también la intervención para reiterar su compromiso en la lucha contra la violencia de género y garantizar que "no cejaremos en nuestra determinación de luchar con todos los medios necesarios contra esta lacra de machismo criminal".
