La sequía que padece España podría prolongarse en otoño si se cumplen los pronósticos meteorológicos de que dispone el Ministerio de Medio Ambiente, que indican que las lluvias en los próximos meses serán normales, pero no bastarán para que se recuperen los embalses.

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, explicó ayer que la fiabilidad que se puede conceder a esos pronósticos para los próximos tres meses es, por ahora, "baja", pero también subrayó que ningún informe predice que a medio plazo se vayan a producir lluvias que alivien la situación.

"Será difícil que, incluso con una pluviometría normal, se recuperen los embalses que, en algunas zonas de España, están en una situación francamente mala. De momento creo que tenemos que estar instalados en la cautela", dijo la titular de Medio Ambiente al presentar junto con la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, el Observatorio Nacional de la Sequía.

Narbona recalcó que la sociedad debe tomar conciencia de que en España las sequías no son un fenómeno excepcional, sino "recurrente", al que no se puede responder "de forma compulsiva" sólo con "obras de emergencia" ni menos aún con "improvisación", sino con una planificación "constante".

"Debemos actuar de esta forma no sólo por la coyuntura de este año, sino porque lo más probable es que el 2006 también sea un año seco", advirtió.

Cristina Narbona pidió "solidaridad" con los agricultores, "porque este año, de nuevo, son quienes más sufren las consecuencias de la sequía, y prácticamente en toda España han tenido que dejar ya de regar".

Fuegos

Ante las críticas "excesivas" a sus quejas sobre la "complicidad social" con los incendios forestales, la ministra de Medio Ambiente recordó al PP que el fuego mató a 32 personas y quemó un millón de hectáreas de terreno durante sus ocho años de gobierno.