La alcaldesa de Meis y el diputado provincial Gregorio Agís inauguraron el centro social de San Martiño. La instalación ocupa la parte posterior de la casa rectoral, donde antiguamente se encontraban los establos y el gallinero. Una vez finalizados los trabajos, el edificio presenta un aspecto mas actual y funcional, con estancias y una gran cubierta de cristal en el pasillo dando lugar a un espacio mas iluminado y que permite ver el cielo desde su interior.

Tras una inversión de 230.000 euros -de los cuales 200.000 fueron aportados por la Diputación a través del Plan Concellos, mientras que los 30.000 re stantes los financió el Grupo de Desenvolvemento Rural (GDR) de O Salnés-Ulla-Umia-, los vecinos de San Martiño veían poner el broche de oro a una ansiada obra, que les permite no tener que desplazarse a San Salvador para participar en las actividades del Concello, como los populares talleres de memoria. La obra salió a licitación dos veces, pero quedó desierta en ambas. Tanto es así que el Concello llegó a convocar una consulta pública en el vecindario, para que la parroquia decidiese si quería seguir adelante con el proyecto o desistir y hacer el centro social en otro lugar. Pero la práctica totalidad de los consultados prefirió seguir adelante. El Arzobispado cede las instalaciones por un período de 30 años.