Con la llegada del otoño, son muchas las personas que se plantean comenzar a mejorar su aspecto de cara al verano y es cuando más consultas se realizan sobre cirugías plásticas, principalmente liposucción. “Es la mejor técnica para modelar nuestro cuerpo, sacando depósitos grasos de aquellas zonas que tras seguir unas pautas alimenticias óptimas y realizar ejercicio siguen resistiéndose”, explica el doctor Jorge Novoa, médico especialista en cirugía plástica, estética y reparadora.

Las áreas del cuerpo donde más se realiza está técnica suelen ser cartucheras, muslos y abdomen, aunque en los últimos años los brazos y la papada están siendo cada vez más demandadas.

“Una liposucción no es un método de pérdida de peso sino de remodelado corporal”, apunta el experto, quien apostilla que tras someterse a una es muy normal pesar entre 1 y 3 kilos más debido a la inflamación.

El antes y el después de una liposucción.

El otoño es la época ideal para llevarla a cabo, puesto que el postoperatorio es largo: en algunos casos es necesario esperar 6 meses antes de ver el resultado definitivo. Además, requiere el uso de una faja ortopédica durante al menos 20 días o un mes.

Por otra parte, para recuperarse correctamente es importante descansar y no exponerse a la luz solar directa. Por lo tanto, es ahora cuando resulta más fácil cumplir esta última condición.