En Comú-Podem y En Marea, las confluencias catalana y gallega con la que Unidos Podemos concurrió a las elecciones generales, tampoco renunciarán la próxima legislatura a tener grupo parlamentario propio en el Congreso independiente del partido morado. La coalición A la Valenciana, por su lado, también lo intentará pero ya avanza que, en caso de que la Mesa de la Cámara no se lo permitiera, los cuatro diputados de Compromís se integrarán de nuevo en el Mixto.

En la pasada legislatura, Podemos aspiraba a tener cuatro grupos parlamentarios, el suyo propio y otros tres para cada una de las confluencias con las que se presentó a las elecciones del pasado 20 de diciembre.

En Comú-Podem, En Marea y Compromís-Podem hicieron esa solicitud a la Mesa del Congreso que, sin embargo, la rechazó de plano porque ninguna de las coaliciones respetaba el artículo del Reglamento que impide que diputados de la misma candidatura puedan formar grupos parlamentarios separados. Ese mismo argumento puede utilizar la futura Mesa para impedir a las confluencias organizarse por separado.

Ante esta respuesta del órgano de gobierno de la Cámara Baja, En Comú-Podem y En Marea ni siquiera llegaron a registrar formalmente su petición de constituirse como grupo y directamente asumieron que debían integrarse dentro de Podemos, donde, eso sí, reclamaron tener un espacio propio.

Por su parte, la coalición valenciana, conformada por Compromís y Podemos, se dividió: los diputados morados se integraron en el grupo de Podemos, mientras que los cuatro de Compromís intentaron de forma simbólica constituirse por separado a sabiendas de que no cumplían los requisitos, pues, entre otras cosas, les faltaba un diputado para llegar a cinco. Cuando la Mesa lo impidió, se pasaron al Mixto.

Volverán a probar suerte

En la XII Legislatura, que se inagurará el próximo 19 de julio --con la constitución de las Cortes Generales--, las tres confluencias tienen previsto reivindicar nuevamente lo que consideran su derecho de constituirse como grupo parlamentario, aunque asumen que será difícil.

En las elecciones de este domingo En Comú (Barcelona en Comú, Iniciativa, Esquerra Unida y Podem) cosecharon 12 escaños, los mismos que el 20D, y En Marea (Podemos Galicia, Anova y Esquerda Unida) perdió uno, pasando de seis a cinco, y ambas coaliciones alcanzaron el 15% mínimo de votos en sus comunidades, requisitos ambos necesarios para poder reclamar grupo propio.

Por su parte, la coalición A la Valenciana, que conforman Compromís, Podemos y EUPV, también obtuvo ese porcentaje mínimo en las tres provincias valencianas y 9 diputados (cuatro de Podemos, cuatro de Compromís y uno de IU). En caso de que la Mesa del Congreso tampoco en esta ocasión les de el placet de tener grupo propio, los cuatro parlamentarios de Compromís se integrarán en el Mixto, al igual que hicieron en la pasada legislatura.

En el mixto, el partido mayoritario sería CDC

Si así fuera, el partido que lidera Mónica Oltra no sería ya el partido mayoritario del Mixto ya que, por primera vez, Convergència (CDC) ya no cumple los requisitos que marca el Reglamento para formar grupo propio, pese a sus ocho diputados.

Y es que CDC no sólo no ha conseguido el 15% de los votos en todas las circunscripciones catalanas (se queda por debajo en dos de ellas), sino que tampoco alcanzó ese porcentaje en el conjunto de Cataluña, que es el argumento que les salvó en enero y que PP y PSOE aceptaron en la Mesa para facilitarles grupo propio.

Tras la constitución de las Cortes Generales el próximo 19 de julio, los partidos tendrán de plazo hasta el día 25, para crear los grupos parlamentarios, siempre que la Mesa del Congreso no amplíe ese plazo si lo considera oportuno.