Los vecinos de O Salnés y Ullán volvieron ayer a depositar su confianza en Alberto Núñez Feijóo para gobernar Galicia durante cuatro años más. Así, el PP se alzó como la fuerza más votada (con un 48,1% al 97,5% escrutado) en casi todos los concellos, salvo en el feudo socialista de A Illa, donde el PSOE le ganó por 9 votos, y en O Grove, donde el BNG le venció por dos papeletas. En algunas localidades como Vilanova, bastión popular de Gonzalo Durán, el partido de la gaviota obtuvo más del 60% de los sufragios, como también en Meaño y Valga, aunque en estos casos con menos apoyos que en 2016. En el conjunto de la comarca la formación conservadora perdió más de 2.000 votantes, aunque subió ligeramente en porcentaje de voto.
El BNG de Ana Pontón fue arropado en la comarca por más del doble de electores que en las anteriores autonómicas, erigiéndose como segunda fuerza y por tanto arrebatándole el puesto a un PSOE que, aunque subió ligeramente (casi un 2%), no fue suficiente para hacer frente al crecimiento vertiginoso del Bloque (que ganó más de 7.300 electores en O Salnés y en Catoira se quedó a un puñado de papeletas de ganar los comicios, con 636 frente a los 683 del PP) ni a la consolidación de la formación de Feijóo.
El Partido Socialista fue uno de los grandes perdedores de la noche electoral, junto con Galicia en Común, Ciudadanos y Vox, que apenas arañaron un 7% de los votos entre los tres partidos.
Ni en Vilagarcía, donde el socialista Alberto Varela gobierna con mayoría absoluta tras obtener el año pasado el 47,46% de los apoyos, el mensaje del partido del puño y la rosa fue capaz de calar, y ello pese a los esfuerzos de traer a la capital arousana esta campaña a primeros espadas, como José Luis Ábalos o María Jesús Montero, además del mitin en los jardines de Ravella del propio candidato a la Xunta, Gonzalo Caballero. Pese al batacazo del PSdeG, el vilagarciano Julio Torrado, número 4 por Pontevedra, repetirá como diputado en la Cámara gallega.
El parlamentario hace autocrítica: "Los resultados no son los esperados y merecen una reflexión profunda". Felicita al PP "que gana indiscutiblemente" y también a Elena Suárez como candidata por Vilagarcía. "O Salnés se comportó electoralmente como el resto de Galicia, aunque la diferencia del PSOE con el BNG fue menor, lo que demuestra que el partido tiene una implantación en la comarca", comenta Torrado.
Por su parte, Elena Suárez manifestó sentirse "enormemente feliz y orgullosa de haber sido elegida diputada autonómica por la ciudadanía junto a Cores Tourís. Es una gran responsabilidad que asumo con una enorme ilusión. En los próximos 4 años trabajaré sin descanso para que Vilagarcía, O Salnés y el resto de la provincia tengan peso específico en el Parlamento de Galicia". Añade que "los gallegos han demostrado que quieren estabilidad, certezas y que para ello han vuelto a confiar en el mejor líder de Galicia, que es Feijóo, y el mejor partido, que es el PP".
También la cambadesa Montserrat Prado, con amplia experiencia en O Hórreo, volverá a ejercer como diputada. "Para el BNG estos resultados son una satisfacción y parece una evidencia que el pueblo gallego nos dio confianza de una forma muy clara como alternativa para confrontar las políticas del PP", expresaba anoche la número 2 por Pontevedra. "Este resultado también nos da mucha responsabilidad, vamos a estar a la altura de la situación y no vamos a fallar", agrega.
Con respecto a la participación, aunque subió en el conjunto de Galicia, no lo hizo en O Salnés, donde votaron menos del 60% de los electores frente al 64,05% de 2016.
