En la recta final de la campaña el candidato del PSdeG, instó ayer a los progresistas a poner la "sexta marcha" para lograr un cambio en las elecciones del próximo domingo, día 12 de julio, que permita "abrir las ventanas" y que entre "aire fresco" en Galicia tras 11 años de gobiernos del PP.

"Hay que poner la sexta marcha, el partido ya tiene puesta la quinta y queda el sprint final", manifestó en un mitin junto al ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, en Ourense.

En su intervención, asimismo, vaticinó que Ourense va a ser la mayor "fuente de votos" para relevar a Feijóo al frente de la Xuntatras los pactos del PP que permitieron elevar a la alcaldía a Gonzalo Pérez Jácome. Además, se comprometió ante el ministro de Transportes a pedir el cambio del proyecto de la intermodal de la ciudad tan pronto como llegue a la Xunta.

A unas horas del cierre de la campaña electoral marcada por la crisis sanitaria del Covid, el candidato del PSdeG, Gonzalo Caballero, se reunió también con los alcaldes socialistas de A Coruña, Culleredo, Bergondo, Cerceda, Paderne, Betanzos y los independientes de Carral e Cambre. El líder socialista apeló a la movilización para que -dijo- "no haya un progresista que el domingo quede en casa" sin dar el apoyo necesario para "retirar a la derecha y hacer políticas que permitan salir de esta crisis sin que nadie quede atrás".

Caballero propuso un "gran contrato social para una Galicia de futuro" que -advirtió- cambie la gestión de los recortes, privatizaciones, austeridad y pérdida de empleo que provocó el PP en la crisis de 2009. ."No veo a nadie ilusionado ni que tenga una sonrisa cuando le hablan de Feijóo", cuestionó el líder del PSdeG, al tiempo que advirtió de que la idea de "estabilidad que quiere trasladar el PP es la estabilidad de la agonía", con un candidato que "representa un proyecto agónico que quiere mantener a los suyos en la poltrona".