El PP se ha lanzado a arañar hasta el último voto para sus siglas y en la recta final de la campaña apunta a un objetivo claro: captar el voto indeciso. Para ello echa la red en dos tercios de los votantes de Ciudadanos y a la mitad del electorado socialista.

Desde hoy, los "populares" entregarán más de un millar de "rasca y gana" en sus actos de campaña en las ciudades. En los tarjetones se pueden leer distintos mensajes sobre la educación plurilingüe o rebajas en impuestos.