Por primera vez en su historia, Vox se presentó a unas elecciones municipales en Vigo. Y los resultados no fueron los esperados para la formación. Los dirigentes del partido de Santiago Abascal tenían confianza en poder conseguir al menos un concejal en la Corporación, pero los últimos sondeos ya dejaban entrever que estaban muy lejos de conseguirlo. Y las urnas lo confirmaron. La formación liderada en Vigo por Sergio Maus (que fue nombrado hace poco más de un mes) obtuvo poco más de 1.900 votos, apenas un 1,2% del total, uno de los porcentajes más bajos de entre las siete ciudades gallegas, con Ferrol.