El éxito del PP en la ciudad de Pontevedra y concellos como Baiona, O Porriño y Tui, así como la recuperación de casi 5.000 votos en Vigo permitieron a la formación de Alfonso Rueda ganar tres diputados provinciales y lograr la Presidencia de la Diputación de Pontevedra, que habían perdido en 2015 y que supone un golpe simbólico a la izquierda, a la que deja sin una de las palancas fundamentales para la política local.
El PSdeG sufrió un duro revés a nivel provincial porque en 2019 había cosechado unos resultados espectaculares. Entonces, había logrado el 38,4% de los votos por apenas el 28,8% del PP y el 14,75% del BNG. El domingo por la noche los socialistas se fueron a la cama con el 33,94%, a 2,73 puntos de la “ola” del PP, que alcanzó el 36,67% –13.000 votos más–, mientras que el Bloque alcanzaba el 18,13%.
Un sistema basado en los partidos judiciales
El plan del PP trazado desde hace tiempo, ya cuando Rueda era el presidente del partido a nivel provincial, por lo que parte de la victoria le corresponde, partía del sistema de elección de las diputaciones. Este se basa en los partidos judiciales, una organización que engloba varios concellos. En Pontevedra existen 13 partidos judiciales organizados en siete juntas electorales: Vigo, Pontevedra, Lalín, Ponteareas, Cambados, A Estrada y Tui.
Los resultados se mantuvieron en Cambados, con dos diputados para el PP y uno para el PSOE, y A Estrada, Lalín y Ponteareas, con un representante popular en cada caso. La clave estuvo en las áreas de Tui, Vigo y Pontevedra. Ahí, el PP tenía 1, 2 y 3 representantes, por 1, 9 y 2 del PSOE. El Bloque solo contaba con 1 en Tui y dos en Pontevedra.
El vuelco electoral permitió al PP recuperar uno en cada partido judicial para contar con 2 en Tui, 3 en Vigo y 4 en Pontevedra, mientras que el PSOE perdió el de Tui, se dejó dos en Vigo y cayó en otro en Pontevedra. Por su parte, el BNG contará con uno en Tui, otro en Vigo y dos en Pontevedra.
El gran crecimiento en Tui y O Porriño
Los resultados en los concellos de A Guarda, Oia, O Rosal, Tomiño, Tui, Mos, O Porriño, O Rosal y Salceda determinan el reparto de diputados provinciales de la junta de Tui. En esta, el PP creció en 5.918 votos hasta alcanzar los 26.145, mientras que el Bloque ganó 2.213 apoyos hasta los 14.408. Como a nivel gallego, el único que retrocedió en papeletas fue el PSdeG, que cayó de 14.874 a 10.928: 3.946 menos.
Dos concellos ilustran el bum popular en la zona. En Tui, el PP ganó cuatro ediles pasando de 1.480 votos a 2.976 mientras que el PSdeG perdió tres. En O Porriño, que pasó de elegir 17 concejales a 21, los populares pasaron del 41% al 65% de votos y ganaron nada menos que ocho representantes en la corporación.
El sorpasso de Domínguez a Fernández Lores
Otro de los diputados provinciales recuperados por el PP pertenece al partido judicial de Pontevedra, donde el PP ganó apenas 976 papeletas, por las 722 del BNG mientras el PSdeG se dejaba 626. Obtuvieron, respectivamente, 51.818, 37.761 y 27.763.
En los datos del escrutinio destaca el “sorpasso” de Rafa Domínguez en Pontevedra al nacionalista Miguel Anxo Fernández Lores, alcalde de la ciudad del Lérez desde 1999. En 2019, este había conseguido 16.500 votos como primera fuerza, pero el domingo perdió dos ediles y 3.500 papeletas, mientras que el popular ganó esos representantes y 3.656 sufragios hasta conseguir 16.096, siendo la lista más votada.
El bombazo de Baiona y el repunte de Tapias
El tercer diputado que decantó la balanza fue el correspondiente al partido judicial de Vigo. Antes del 28-M, en el PP recordaban que en 2019 se habían quedado a unos seis mil votos de conseguir un diputado provincial más por esa circunscripción, por lo que, si se cumplían las encuestas y en la ciudad ganaban un edil, lograrían ese representante. Así fue.
En el partido judicial, el PP ganó en total 9.198 votos hasta los 42.192, mientras que el PSOE cayó en 20.789 (de 118.940 a 98.151). El BNG también ganó 8.601: de 11.327 a 19.928.
Pero la clave no solo fueron los casi 5.000 votos que le dieron al PP de Vigo un edil más para lograr cinco representantes en una ciudad donde el PSdeG de Abel Caballero cayó del inédito 68% de apoyos a un 60% que le permite retener una de las principales mayorías absolutas de España. Pero en el partido judicial el PSOE pasó de 9 representantes a 7, mientras que el PP creció de 2 a 3 y el BNG mantuvo el suyo.
¿Fue todo mérito del PP en Vigo, que pese a crecer obtuvo más de tres veces menos papeletas que Caballero? No. Ahí destaca el regreso por todo lo alto de un histórico.
La apuesta por el retorno a Baiona del exconselleiro y expresidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, Jesús Vázquez Almuiña, al que le encargaron recuperar el concello, fue un éxito total. No solo logró el bastón de mando, sino que ganó cinco ediles y pasó de 1.972 votos a 3.989, obteniendo una amplia mayoría absoluta: del 28% al 56% de votos.
La despedida de Carmela Silva por la “tormenta perfecta”
La propia Carmela Silva, presidenta de la diputación desde 2015, apuntó a una conjunción de resultados para la derrota. “Con el BNG, un 18,13%, sumamos el 52,07% de los votos y, sin embargo, perdemos la Diputación de Pontevedra, con esa tormenta perfecta que se da en el Baixo Miño, con el resultado excelente del PP en Porriño, que nos hizo perder un diputado; con un resultado malo del PSdeG en O Morrazo, que nos hace perder otro en el partido judicial de Pontevedra, y con un resultado excelentísimo en el partido judicial de Vigo, donde por la distribución de votos, el PP gana un diputado. En total, el PP pasa de 11 a 14”, resumió ayer Silva durante la rueda de prensa para certificar la pérdida del timón provincial.
“Tenemos un resultado tres veces mejor que la media de Galicia [la distancia a nivel autonómico con el PP es de nueve puntos], pero el reparto por partidos judiciales hace que este sea el resultado”, lamentó.
Las quinielas para la nueva presidencia del PP
Los populares afrontan ahora el debate sobre quién asumirá la Presidencia de una institución clave por el músculo financiero que tiene para actuar en los concellos pequeños y como contrapoder a Abel Caballero. La candidata del PP de Vigo, Marta Fernández-Tapias, eludió aclarar si optará a ese puesto, aunque sostuvo estar “a disposición del partido” tras la “misión cumplida” de recuperar la diputación.