Los socialistas valencianos ganaron ayer las elecciones autonómicas en la Comunidad Valenciana con el 24,64% de los votos y 27 diputados, en lo que supone su primera victoria en unos comicios en los últimos 28 años, y se convierte en la primera fuerza cuando se lleva escrutado el 52% de los votos.

El PP se ve relegado por ahora a segunda fuerza, al obtener el 18,96% de los votos y 20 escaños, mientras que Ciudadanos se aúpa a la tercera posición, con el 17,04% de los votos y 18 escaños.

Compromís pasa a la cuarta posición, con un apoyo del 15,95% y 16 escaños; Vox se erige en la quinta fuerza con el 10,27% de los votos y 10 escaños y entra por primera vez en Las Cortes valencianas; y Podem, en coalición ahora con Esquerra Unida, ocupa el sexto lugar con el 8,13% de los votos y 8 diputados.

Con estos datos, el PSPV de Ximo Puig podría volver a presidir la Generalitat con una reedición del pacto del Botànic y el apoyo de Compromís y Podem, mientras que el PP y Ciudadanos seguirían en la oposición.

Además, el Parlamento regional tendría seis grupos por primera vez en la historia democrática, ya que desde 1983 el máximo de grupos que se habían configurado en el hemiciclo eran cinco, y Ciudadanos supera a Compromís como tercera fuerza política.

A los cinco grupos parlamentarios que ha habido en esta última legislatura (PP, PSPV-PSOE, Compromís, Podem y Ciudadanos), en la décima legislatura resultante de estas elecciones autonómicas se sumará Vox, que irrumpe en la Cámara valenciana con 10 diputados, al 17,42 por ciento del recuento.