El expresidente del Gobierno José María Aznar ha alertado hoy del peligro de caer en la "tentación" de pretender "polarizar y radicalizar" a los españoles ante las elecciones del 26 de junio, porque ha advertido de que en ese caso ganan siempre los mismos, "los peores".

Aznar ha lanzado esta advertencia en su intervención en la clausura del curso organizado por el Instituto Atlántico de Gobierno, que él preside, y en la que ha explicado que "alentar y alertar" son las dos únicas actividades públicas a las que se dedica y siempre pensando en lo mejor para España.

En un momento en el que los partidos están ultimando sus estrategias de campaña ante el 26J y en la que se apunta la posibilidad de que el PP la pretenda polarizar para sacar rédito de los riegos que considera que supone el "extremismo" de Podemos, el exjefe del Ejecutivo ha expuesto su opinión sobre lo que puede ocurrir.

Ha subrayado que ahora mismo no hay trabajo más importante a favor de España que recuperar la voluntad de concordia "para evitar un descarrilamiento histórico que a día de hoy no es en absoluto imposible".

Eso significa, a su juicio, "abandonar de inmediato cualquier tentación de polarizar, amedrentar, extremar, excluir, radicalizar, dividir o enfrentar a unos españoles con otros".

"En esa competición siempre ganan los mismos, que son siempre los peores, y siempre pierden los partidarios de la convivencia", ha añadido.

Se trata de un trabajo de fondo que, según considera, implica retomar de inmediato todas las tareas destinadas a vincular, acercar, consensuar, ayudar, incluir, confiar y acordar entre españoles.

"En suma, implica hacer cuanto se necesite para defender de modo efectivo y duradero el marco de convivencia que nos ha proporcionado los mejores años de nuestra historia", ha explicado.

Tareas que ha dicho que hay que desarrollar en el marco de la monarquía parlamentaria española con todas las implicaciones de procedimiento que eso conlleva, "a cuyo beneficio todos tenemos obligación de contribuir -ha precisado- con los sacrificios personales que sean necesarios en cada momento".

Aznar ha considerado que hoy se viven intensos procesos sociales y políticos de desagregación, fractura, polarización y discordia, que cree que son consecuencia de la "desmemoria" que supone dejar de prestar atención a las lecciones del pasado.

Para él, los radicalismos, populismos y nacionalismos excluyentes, así como la banalización de la política, la transgresión de la institucionalidad como costumbre y los desafíos a la convivencia son expresiones de una misma actitud.

"Una actitud lo bastante vulgar como para que se pueda generar la idea de que es sofisticada, y lo bastante antigua como para que pueda pasar por avanzada y nueva ante quienes no conocen bien su propio pasado", ha añadido.

El presidente de FAES ha lamentado que no se tengan presentes las enseñanzas de la Segunda Guerra Mundial y de la Guerra Civil.

En esa línea, ha alertado de que hoy están volviendo las ideologías totalitarias vencidas de la Segunda Guerra Mundial, que la OTAN "está debilitada" y la UE "desorientada y desafiada".

También cree que existe la amenaza real del populismo allí donde más daño puede hacer, en las instituciones.

Ante ello ha subrayado que el trabajo de la política es asegurar la convivencia y, en clara referencia al líder de Podemos, Pablo Iglesias, "no asaltar el paraíso, que es siempre el camino más directo hacia el infierno del conflicto violento".

El expresidente ha puesto en valor el consenso y la convivencia de la Transición y ha avisado de que la continuidad histórica de "este proyecto de éxito de convivencia y progreso está seriamente comprometida por una combinación de hiperactivismo de quienes lo desprecian y de desatención o quizás de falsa prudencia de quienes lo aprecian".

"Hemos avanzado demasiado por el camino equivocado. Debemos dar la vuelta y debemos hacerlo ya", ha pedido Aznar, quien ha considerado que, de esa forma, España recuperará pronto su buen camino como nación europea y atlántica