Galerías históricas

Castrelos, cien años desde que el pazo se donó al pueblo de Vigo

El Marqués de Alcedo legó su residencia al concello a condición que se destinase a uso público y a que se crease un museo

Este 2025 se cumple un siglo de la donación al pueblo de Vigo del Pazo Quiñones de León. Su propietario, el Marqués de Alcedo, puso entonces dos condiciones: la creación de un museo y de un gran parque público.

Así lo dispuso Fernando Quiñones de León el 12 de diciembre de 1924, al verse sin descendientes, pero no sería hasta el 11 de marzo cuando el ayuntamiento olívico aceptaría el legado en sesión plenaria y extraordinaria.

El museo, el primero de la ciudad, no se abriría hasta 1937, en plena Guerra Civil. Su inauguración estaba prevista un año antes, pero el alzamiento militar y la contienda se lo impidieron al último alcalde republicano de Lavadores, Emilio Martínez Garrido.

El conjunto histórico -pazo y jardines- constituía y aún supone un elemento museístico de primer orden ya que en buena medida conservan su estructura y disposición originales.

Se desconoce la fecha de la edificación, pero su reconstrucción está datada en 1670, tal como consta en el escudo sobre su entrada principal. Se sabe que la ya existía en el siglo XVI, aunque bajo el nombre de Pazo de Lavandeira.

El popularmente conocido como «parque de Castrelos» tiene una extensión de 220.000 m2, lo que lo convierte en uno de los grandes pulmones verdes del casco urbano de Vigo.

Cumpliendo con la voluntad del Marqués de Alcedo, es un espacio para el disfrute público y colectivo, ya que desde hace décadas acoge los conciertos de las fiestas de Vigo, romerías, actos institucionales, bodas, un gran parque infantil e incluso actos reivindicativos.

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