Magna presenta un ERE para personal de oficina de Porriño

El proveedor avisa de una «sobredimensión» en la plantilla, de 440 trabajadores, de los que la mitad podrían verse ahora afectados

Exterior de la planta de Magna Seating Vigo, en Porriño

Exterior de la planta de Magna Seating Vigo, en Porriño / Marta G. Brea

Adrián Amoedo

Adrián Amoedo

La plataforma STLA Small oficializada esta semana para las plantas de Stellantis en Vigo y Zaragoza era casi un secreto a voces. Faltaba el anuncio, pero en ambas instalaciones se venía trabajando en ella y en los modelos futuros que albergarán, del segmento B. Por eso, la guerra de costes del fabricante con sus proveedores ya había empezado mucho antes y algunos se fueron quedando por el camino, perdiendo en favor de otras opciones, principalmente low-cost. Entre los primeros nombres que se quedaron fuera de la puja estaba Magna Seating Vigo, factoría situada en Porriño que no pudo optar a fabricar las armaduras de asientos para el próximo Peugeot 2008. Se quedó con el trabajo para las furgonetas K9, cuya vida útil se alargó, pero aquello supuso un golpe para la planta. Ahora, la dirección presentó al comité un preaviso para negociar un expediente de regulación de empleo (ERE) para tratar el «sobredimensionamiento de plantilla». Aunque todavía no da cifras, los responsables de la planta trasladaron a los sindicatos explican que la medida afectará a la parte del personal indirecto, más o menos la mitad de los 440 trabajadores.

Entre la primavera del pasado año, cuando FARO publicó que Magna no fabricaría las armaduras de los asientos del nuevo 2008 (como tampoco consiguió con la actual generación del SUV), y ayer, comité y dirección se reunieron en 12 ocasiones para intentar desbloquear las negociaciones del nuevo convenio. Hasta el momento, los avances han sido mínimos y ayer la firma puso encima de la mesa el ERE. Según las fuentes consultadas, la medida afectaría al personal indirecto, de oficinas, ingeniería, soporte de producción... Y no tanto a los que fabrican para las actuales furgonetas K9 de Balaídos.

Se abre ahora un plazo de máximo siete días para constituir la comisión representativa de la parte social. A partir de ese momento los sindicatos esperan la memoria justificativa y conocer el alcance real de la medida que plantea la empresa.

La planta de Magna es de la multinacional canadiense desde que en 2018 se hizo con el entonces segundo mayor proveedor gallego de automoción, Viza. Desde entonces, produce las armaduras para las K9 y también, con Faurecia, para Mercedes Vitoria. Este último contrato estaba pendiente de extensión y, pese a que se consiguió, a la firma todavía le sobra personal. En parte también porque por el camino finalizó otro pedido: la tercera fila de asientos de un modelo Peugeot que se fabrica en Francia.

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