Seresco cumple 50 años en la comunidad y lo hará como referente del sector en un evento que celebrará el 15 de septiembre en el Palacio de la Oliva (Vigo). A solo dos semanas, su delegado en Galicia desgrana en esta entrevista los retos y oportunidades de un mercado que necesita cada vez más profesionales para abordar cuestiones tan urgentes como la ciberseguridad. “Todos nos estamos peleando por captar y retener talento”, dice Andrés Riveiro desde la empresa tecnológica, enclavada en Urzáiz. La firma con base en Asturias controla más de 1,2 millones de movimientos de ganado al año, monitoriza alrededor de 68.000 explotaciones vitivinícolas y gestiona cerca de 364 millones en ayudas agrícolas vinculadas a la PAC. Por si fuera poco, tramitó más de 180.000 nóminas solo en 2022 en el territorio gallego.
–Seresco nació como el primer centro de formación informática en Galicia. Ahora ofrece soluciones digitales a un sinfín de empresas y administraciones. ¿Qué les llevó a cambiar de modelo de negocio?
–Fuimos pioneros con la delegación de Galicia, que fue la primera que abrió Seresco fuera de Asturias, donde está la central. Allá por 1973 nos instalamos en aulas de la Escuela de Ingeniería Industrial (EII) y empezamos a impartir formación informática. De hecho, una gran parte de los responsables informáticos de las empresas más importantes de la zona tienen en común que se han formado con nosotros. Observamos que aquí había una gran demanda de profesionales tecnológicos, seguramente influenciada por Citroën, y por ello decidimos comenzar aquí con ese plan formativo, como centro de formación. Ya no lo somos, ahora nos dedicamos a otra cosa. Ofrecemos otro tipo de servicios, también tecnológicos, pero no específicamente formación. En un momento determinado optamos por dejar todo el tema porque, ahora sí, la oferta pública es bastante importante.
–¿Y cómo está la cosa a día de hoy? ¿Somos capaces de generar todo el talento que están demandando las empresas tecnológicas?
–Ahora la demanda de capacidades digitales es elevadísima. Estamos todos peleándonos por captar y retener talento, y también esforzándonos mucho para que la gente esté cómoda a nivel laboral, además de cómoda financieramente. Lo hacemos con el objetivo de evitar el turnover –indicador que mide la cantidad de trabajadores que deja una empresa en un período concreto–. Aunque no en nuestra compañía, puesto que nos hemos mantenido estables, ha sido bastante elevado en los últimos años.
–Cuando tenéis que contratar, ¿qué os encontráis en el mercado?
–Te encuentras un poco de todo… Hay jóvenes con mucho conocimiento tecnológico, pero con bajo conocimiento funcional. Eso forma parte de lo normal. Nosotros lo que sí estamos intentando es acercarnos a la Universidade de Vigo todo lo posible para trasladarle cuáles son nuestras necesidades. Participamos en multitud de foros de empleo con estudiantes que actualmente se están formando para trasladarles a ellos y a la propia institución académica cuáles son las necesidades más inmediatas del mundo empresarial gallego.
–El relevo generacional afecta directamente al crecimiento de cualquier colectivo profesional, y en consecuencia a la plantilla de las empresas. ¿Cuáles son vuestras aspiraciones en este sentido?
–Seresco cerró el pasado 2022 con una facturación de 34 millones de euros, pero hay una aspiración estratégica, que además estamos cumpliendo, de duplicar esa cantidad en 2025. A nivel nacional somos unos 800 empleados y seguramente si seguimos así creceremos por encima de los 1.000. En Galicia somos 70, el crecimiento será más o menos proporcional. Creceremos por encima de los 80 y a lo mejor en 2025 nos acercamos a los 100.
–Para ello, como es evidente, la compañía tiene que seguir produciendo las soluciones tecnológicas que ofrece tanto a empresas como a administraciones públicas. ¿En qué proyectos estáis trabajando?
–Tenemos muchas áreas de actividad: consultoría y software, infraestructura de sistemas y servicios, nómina y recursos humanos, cartografía y catastro… Aquí en Galicia trabajamos muchísimo con la Xunta, sobre todo con Medio Rural. Como anécdota, cuando vas por ahí y ves una vaca, seguramente observarás que lleva un crotal con un número identificativo. Toda la trazabilidad de la vida de ese ganado se gestiona en su mayoría con aplicaciones nuestras. Además, tenemos otros proyectos de innovación, por ejemplo para identificar viñedos con fotos generadas desde satélites o con imágenes de drones y para gestionar toda la documentación que tienen que presentar los agricultores para cobrar las ayudas de la Política Agraria Común (PAC). A nivel corporativo, por ejemplo en el área de nóminas, utilizan nuestra plataforma empresas tan conocidas como Adolfo Domínguez o Roberto Verino. También participamos en una gran parte de los proyectos tecnológicos de Stellantis Vigo, con los que tenemos una relación de muchos años y un vínculo muy consolidado en estos momentos.
–¿Cómo os imagináis sectores como el campo, el textil o la automoción dentro de 20 o 30 años?
–Las empresas están incorporando la tecnología masivamente. Hay procesos de digitalización que se están desarrollando ya y las nuevas generaciones que están llegando a las empresas gallegas están profesionalizando esas compañías y están apostando firmemente por la digitalización. Es una forma ya no solo de modernizar tus empresas, sino de combatir posibles crisis o posibles problemas en un entorno que cada vez es más cambiante.
–Esa cultura de informatizarse, de digitalizarse al máximo para ser más eficientes, hace año parecía calar menos en las pymes. ¿Se han dado cuenta de que es la clave de su futuro? ¿Son más abiertas de mente a la hora de dejarse asesorar e implementar las soluciones tecnológicas que necesitan?
–Sí, en un determinado punto del pasado podíamos intuir esa desconfianza hacia la tecnología. Es una barrera que se ha superado ampliamente porque los hechos demuestran que las empresas que se han dotado a nivel tecnológico, que han apostado por la digitalización, han crecido más que las otras.
–¿Y qué otros retos os encontráis ahora mismo aquí en Galicia? ¿Qué desafíos hay y qué oportunidades?
–Están en la ciberseguridad. Vivimos en un mundo hiperconectado donde las grietas de seguridad son cada vez mayores. Nosotros queremos estar ahí, protegiendo a las compañías. Ofreciendo servicios de mantenimiento de sistemas o servicios de Help Desk para aquellas empresas que tienen un parque de ordenadores o de usuarios informáticos elevado. La idea es darles soporte cuando sea preciso sin que estas compañías tengan que tener una estructura dedicada a ello.