El ministro francés de Economía, Bruno Le Maire, afirmó que la Unión Europea debe seguir adelante con su plan de prohibir la fabricación de nuevos vehículos de combustión de aquí a 2035, oponiéndose así a lo que reclaman desde los gobiernos de Alemania e Italia. “No podemos decir que hay una emergencia climática, pero retroceder en la transición a los vehículos eléctricos”, apuntó en France Info.

Alemania e Italia plantearon objeciones a la prohibición pocos días antes de la votación prevista, exigiendo una excepción para los motores alimentados por combustibles sintéticos, retrasando indefinidamente la decisión. La Comisión Europea ofreció algunas garantías sobre los también llamados e-combustibles, pero aún no está claro si servirán para superar este punto muerto.

Le Maire señaló que Europa lleva entre cinco y diez años de retraso con respecto a China en el desarrollo de coches eléctricos y que debe evitar enviar mensajes incoherentes a los fabricantes de automóviles, como las francesas Stellantis NV y Renault SA.