Zona Franca asumirá la subestación de alta tensión y la alquilará a Stellantis

La fábrica dispondrá de un transformador particular, que podrá superar los 10 millones de euros de inversión | REE deberá canalizar 60 kilómetros de red de alta tensión hasta Vigo

Lara Graña

Lara Graña

En el polígono industrial de El Serrallo, en Castellón, operan dos grandes consumidoras de energía eléctrica: la refinería de BP y la planta química UBE. “De forma inminente”, como avanzó la semana pasada Red Eléctrica Española (REE), estas compañías dispondrán de un suministro de muy alta tensión, de 220 kilovoltios (kV), con una subestación que ha supuesto una inversión de 11 millones de euros. Es un proyecto muy similar al acometido en Maia (Portugal) a cargo de Redes Energéticas Nacionais (REN), para colmar en este caso las necesidades de la empresa Siderurgia Nacional y por idéntico importe. Y es el mismo que se llevará al fin a término en el polígono vigués de Balaídos, que permitirá que la factoría de Stellantis y toda su red de proveedores dejen de sufrir caídas constantes y microcortes en la red.

Una obra “prioritaria” para toda la industria de automoción y que ya tiene garantizada tanto su ejecución como los fondos para sufragarla. El Consorcio de Zona Franca de Vigo se ofrece tanto a financiar como a ejecutar la construcción de la subestación en el entorno de la planta, y sus técnicos trabajan ya en una hoja de costes para elaborar un presupuesto preliminar, como apuntaron a FARO fuentes de la entidad que dirige David Regades.

Esta infraestructura, la de la nueva subestación en Balaídos, será una pequeña parte del proyecto que permitirá enganchar la industria de Vigo a la red de 220 kV. A día de hoy, la muy alta tensión pasa de largo de la ciudad, con una línea que conecta Pazos de Borbén con Atios (O Porriño). De modo que la actuación será cuádruple: llevar el cableado desde Pazos a Vigo, construir una subestación en el polígono de Balaídos, levantar otra subestación específica y particular para Stellantis –la que prevé costear Zona Franca– y devolver este enlace hasta Atios.

En suma, se canalizarán en torno a unos 60 kilómetros de red de alta tensión, como figura en el proyecto que ya había planificado REE para el periodo 2015-2020 y que el Gobierno central no llevó a cabo. Entonces, la inversión se cuantificó en 66,8 millones de euros, sin contar con la subestación de la planta de vehículos. Como avanzó este lunes la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, serán los fondos europeos REPowerEU los que aportarán el dinero para la parte que corresponde a Red Eléctrica.

Proyecto Nuevo Vigo de alta tension

Simón Espinosa

La subestación propia para Stellantis Vigo irá aparte. La factoría deberá disponer de una infraestructura adaptada a sus necesidades de producción, y adecuar su propia instalación eléctrica a un suministro de 220 kilovoltios. Una vez que se haya concluido la obra contigua a la fábrica –se trata de un equipamiento compacto, que se diseñan para una óptima integración visual en el entorno–, Stellantis abonará una cuota de alquiler al Consorcio en concepto de uso de la subestación, de igual modo que hace ya con la Nave H de Balaídos o como abona GKN por sus instalaciones en el mismo polígono. “Hemos recibido una fantástica noticia por parte del Gobierno de España: la confirmación de la línea de alta tensión al polígono de Stellantis”, valora a este periódico David Regades. “Sin duda es un gran favor que le hace al ecosistema de la automoción y un paso decisivo para traer la nueva plataforma del vehículo eléctrico, la plataforma STLA Small”, que será encajada en el Perte VEC (Vehículo Eléctrico y Conectado).

Para “toda la red”

El desbloqueo de la alta tensión para la ciudad de Vigo será determinante no solo para la industria de automoción –que ha calculado que los microcortes y apagones que sufre menguan su producción anual en un 6%–, sino para disponer de una red capaz de alimentar las nuevas formas de movilidad. Así lo destacó ayer el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones. “Con la nueva planificación podrá dar servicio no solo a Vigo y Stellantis, sino de toda la red y precisamente para dar cabida a toda la extensión de renovables”.

La olívica es a día de hoy la única gran ciudad española sin una conexión eléctrica de 220 kV; la antigua PSA es, por tanto, la única factoría de automóviles del país, siendo además la más productiva, que trabaja con un suministro de 132 kV. El acelerón hacia los vehículos eléctricos, impulsado a nivel comunitario y defendido en todo momento por el Ejecutivo de Pedro Sánchez, requerirá de una amplia red de puntos de carga.

La ejecución de este ansiado proyecto será inminente, como apuntaron a FARO desde Transición Ecológica. Se realizará una modificación puntual en la actual planificación de la red de transporte de energía antes del 31 de marzo, un procedimiento excepcional habilitado por el último Real Decreto de medidas para paliar los efectos de la guerra en Ucrania. Literalmente, expone que “contempla el lanzamiento de una nueva planificación de la red de transporte de energía eléctrica para dar cabida a las necesidades de refuerzo de la red que se han identificado”. Y continúa: “Mediante este real decreto-ley se introduce un mandato al Gobierno para que, en el primer trimestre de 2023, inicie una modificación de aspectos puntuales de la planificación de la red”.

Suscríbete para seguir leyendo