Adolfo Domínguez reduce sus pérdidas un 81% y desembarca en el alquiler de ropa

Adolfo Domínguez se despide del fortísimo golpe que la pandemia dio al negocio de la moda. El histórico grupo gallego del textil logró reducir un 80,1% sus pérdidas durante los nueve primeros meses de su actual ejercicio fiscal –de marzo a noviembre de 2022–, hasta los 2,2 millones de euros. Las ventas ascendieron a 74 millones, tras un incremento anual del 22,6%. El resultado bruto de explotación (ebitda) encadena seis trimestres consecutivos en positivo. Se sitúa en 7,8 millones, a la espera del último trimestre del ejercicio; y el margen bruto crece cuatro puntos, hasta el 61,2%, según la información remitida por la compañía ayer.

El alza de la facturación es común a todos los territorios en los que opera la empresa. En Europa, donde España es el principal mercado, rebotaron un 19%, mientras que el resto de países la subida superó el 32%, “impulsadas especialmente por México, principal filial extranjera del grupo” presidido por Adriana Domínguez, que acaba de lanzarse al negocio del alquiler de prendas con una colección cápsula lanzada en diciembre disponible en un marketplace online especializado en este segmento.

“La digitalización e innovación constante son dos elementos clave en el rejuvenecimiento que experimenta la marca”, señalan sus responsables. La opción de alquilar ropa de Adolfo Domínguez “está en línea con otros proyectos” que “combinan inversiones en sostenibilidad y tecnología”. Fue una de las primeras firmas de retail en España en participar en el Social Live Shopping para la venta en streaming y la creación de una living app en la plataforma Movistar +.