Ninguna de las dos partes quiso poner un titular a la cita y, tanto la nota de prensa del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo como la de Stellantis, encuadran la cumbre “dentro del continuo diálogo entre la compañía y las diferentes administraciones públicas”. Además de la propia ministra, Reyes Maroto, dos altos cargos de su gabinete, el director del Cluster LCV del grupo automovilístico, Juan Antonio Muñoz Codina, y su responsable de comunicación, José Antonio León, a la reunión celebrada ayer acudieron miembros de los gobiernos de las comunidades donde Stellantis tiene fábricas: Madrid, Aragón y Galicia, representada por el vicepresidente primero y consejero de economía, Francisco Conde. Como telón de fondo, las grandes distancias que la empresa tiene con el Perte de la automoción –los proyectos presentados para la factoría de Vigo y la madrileña quedaron fuera de la criba inicial– y las tensiones públicas con el Ejecutivo central por las condiciones.

“En esta ocasión, Stellantis informó al ministerio y a los gobiernos autonómicos de los próximos proyectos industriales a los que optan sus diferentes plantas en España, orientados a cumplir el plan de Cero Emisiones de Carbono que el grupo se ha marcado para 2038”, coinciden en apuntar los comunicados de la compañía y el ministerio, que se comprometió, junto con los responsables regionales, a “explorar las ayudas” de la UE y los propios fondos estatales “pueden destinar a acompañar los planes de Stellantis”.

Las bases del Perte impidieron al grupo optar a las ayudas con la nueva plataforma industrial, denominada STLA, lo que traería aparejados nuevos modelos eléctricos para Vigo. Como alternativa se presentó en coordinación con la factoría de Villaverde (Madrid) el proyecto Arias con una inversión de 43 millones de euros para implantar un nuevo taller de baterías en Balaídos, la reutilización del agua industrial o la reducción del consumo de energía.

Conde salió “esperanzado” del encuentro tras, asegura, alcanzar un acuerdo para crear un grupo de trabajo que buscará “reformular” las condiciones del actual Perte del motor y abrirlo así a proyectos como los que diseña Stellantis. Las tres autonomías presentes trasladaron, según el vicepresidente gallego, la importancia de “evaluar la situación de los proyectos del principal fabricante de vehículos en España” y sacar “nuevas líneas de ayuda”. Algo que Reyes Maroto acogió “positivamente”, en palabras de Conde, que apremió a llevar a cabo los cambios cuanto antes y ofreció a la Xunta como ejecutor de fondos, previa transferencia del Estado.