Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Costes energéticos y sequía tensan la producción y suministro de leche en Galicia

Las granjas reducen cabaña por falta de maíz | Conseguir materia prima sin contrato es muy complicado, pese a la mejora de los precios | Algunas queserías frenan su actividad

Vacas de una ganadería estradense. Bernabé/Cris M.V.

Como en muchos otros sectores, la estacionalidad condiciona la producción láctea. En primavera se registran los mayores volúmenes de recogida, coincidiendo con el ciclo reproductivo de las vacas y el momento de más partos, y en otoño la actividad cae considerablemente. Esa habitual ralentización se adelantó este año a los meses de julio y agosto por la tormenta perfecta que azota al campo gallego. A los pesados costes energéticos y el encarecimiento de fertilizantes e insumos se unen las consecuencias de la sequía, que se lleva por delante buena parte de la indispensable cosecha de maíz para alimentar a los animales. “No es fácil sustituirlo por concentrados alimenticios como en otros momentos porque con el precio actual que tienen es imposible”, explica Óscar Pose, responsable del sector en Unións Agrarias (UU AA). El pienso complementario para la dieta del vacuno de leche supera ya los 400 euros por tonelada, un 40% más que hace un año y un 80% por encima de 2020, según los últimos datos publicados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. A las granjas no les queda otra alternativa que “redimensionarse para adaptarse a la disponibilidad de alimentación a precio razonable”. Sacrifican el ganado más viejo y menos productivo y baja la leche disponible en el mercado, a pesar de la evidente mejora de la retribución por parte de la industria transformadora.

La producción en julio en toda España alcanzó las 607.153 toneladas tras un descenso anual del 4,8%. En Galicia, que concentra una cuota del 40%, la caída fue algo menor, el 3,1%. Con este se encadenan ya cinco meses consecutivos a la baja y el sector da por hecho que los datos de cierre de agosto irán en la misma línea y se mantendrán los recortes en septiembre. “A corto plazo no va a darse la tendencia habitual de los momentos de incremento del precio de la leche”, apunta Óscar Pose, “cuando todos nos tirábamos a aumentar la producción”. Sin alimentación propia para el ganado ni alternativa asequible, “no es posible”. “Tenemos la recría que tenemos –añade–. Incluso comprar animales es complicado. No hay tanta oferta de importación por la reducción de cabaña en otros países a causa también del incremento de sus costes de explotación”.

De hecho, las entregas de leche en el conjunto de la UE disminuyeron un 1,6% en mayo en comparación con el mismo mes de 2021, como recoge el balance del European Milk Market Observatory. El retroceso acumulado desde el arranque del ejercicio roza el 1%.

En paralelo a la contracción de la producción, el número de ganaderos que declararon entregas pasó de 11.043 en junio a 10.923 en julio y en Galicia descendió de 6.209 a 6.172, siguiendo la estela de caídas continuas de los últimos años. Lo mismo sucede con el censo de hembras de más de 24 meses. Se sitúa alrededor 793.600 vacas –322.200 en Galicia– después de una bajada anual del 3,4%.

La leche registró en julio en Galicia un encarecimiento anual del 20%

“No, esa marca hoy no la tenemos”, responden en la sección de charcutería del céntrico supermercado vigués de una de las grandes cadenas de distribución que operan en Galicia. No hay el queso de barra que pide el cliente, fabricado en una cooperativa de la comunidad. “Están teniendo problemas de suministro de leche”, cuenta la responsable de la tienda, que nota también “algunos problemas” en el abastecimiento “de determinadas enseñas de leche en brick”.

“Por las condiciones más específicas que se necesitan para los quesos es donde realmente surgen por el momento los problemas”, confirman desde otro grupo de alimentación de la comunidad. “Sabemos que existen tensiones importantes –añade–, aunque nada destacable hasta ahora en lo que respecta a la leche líquida”.

“Sí es cierto que se puede notar algo más en las queserías”, confirma el responsable del sector lácteo de UU AA. “Buscan más, no porque las ventas aumenten, sino por la caída de la producción”, afirma. Hasta la primavera no vencen la mayoría de los contratos entre explotaciones e industrias “y, por tanto, todo lo que hay, está repartido hasta ese momento”. “Conseguir leche ahora mismo es muy complicado –continúa Óscar Pose–. Hay quien la busca a precios incluso bastante por encima de la media y no la consiguen”. El portavoz de la organización agraria denuncia la aparición de “algunos pequeños compradores” movidos por la especulación. “Arrastran impagos de otros años –advierte Pose– y crean inseguridad para los productores”.

Los productores de la comunidad sufrieron su particular viacrucis a finales de marzo y principios de abril con el paro convocado por una plataforma de transportistas que bloqueó durante días la recogida de leche. Arrastraban los mismos problemas que los convocantes y el desperdicio de la materia prima suponía la gota que colmaba el vaso. Desde ese momento, la industria empezó a pagarles el litro de leche por encima de los 40 euros. La media de julio ascendió a 44,74 euros por cada 100 litros sin IVA, según las últimas estadísticas divulgadas por el Observatorio do Sector Lácteo de Galicia de la Consellería do Medio Rural. El incremento en el último año supera el 37%.

“Como en toda media, hay quien todavía cobra 35 o 36 euros y otros que reciben algo más. Es un dato positivo respecto a lo que cobrábamos antes, pero no olvidemos el importante problema que seguimos teniendo de costes y el agravamiento por la sequía”, reivindica Óscar Pose, que demanda nuevas mejoras a la industria y que la distribución no cometa “el error” de entrar en una guerra de precios. Algunas cadenas están dando pasos atrás en las subidas en lineal de las últimas semanas –la variación anual de la inflación de la leche en julio en Galicia llegó al 20%–, “pero no les va a quedar otro remedio que encarecer el producto un poco más”. 

Compartir el artículo

stats