Después del fuerte impulso en 2020 por las medidas de apoyo para afrontar el estallido de la pandemia, el pasado 2021 fue otro año de intensa actividad para la Sociedad de Garantía Recíproca de la Pequeña y Mediana Empresa de Pontevedra y Ourense (Sogarpo). Concedió 774 avales por un importe de 33,8 millones de euros que generaron una inversión inducida de 41,7 millones. El número de empresas beneficiarias ascendió a 475 con cerca de 4.700 empleados. Crecieron con fuerza las novaciones, 314 (18,8 millones de euros), aunque solo 20 (860.000 euros) se debieron a la necesidad de reestructuración por riesgo de impago, según el balance presentado en la junta general del organismo celebrada ayer en la sede de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP).

La cartera acumulada a cierre de ejercicio roza los 155 millones de euros, un 3,7% más que el ejercicio anterior, y mantiene en total 3.931 avales en vigor. “Por segundo año consecutivo, el riesgo vivo de Sogarpo consigue blindar más de 19.000 puestos de trabajo en Galicia”, según resalta el organismo en una comunicación de prensa. Se trata de un récord histórico en un periodo “positivo y de metas alcanzadas”, aseguró el presidente, Artur Yuste.

Ante el cambio de ciclo que se avecina con la subida de tipos de interés, Yuste admitió la responsabilidad de Sogarpo de “prepararse, jugar la partida y sacar las mejores cartas”. La morosidad es, en sus palabras, “la espalda de Damocles de nuestro sector” y el factor que provocará en el sistema de garantías “que quien lo haya hecho bien estos años imprima un fuerte impulso a su fortaleza”.