Los criadores de visones, ahogados por la paralización de las exportaciones de pieles a dos de sus principales mercados –China y Rusia–, han pedido respecto para el desarrollo de su actividad en este momento adverso para su industria. En la actualidad, hay unas 30 granjas dedicadas a la cría del visón americano en España. De ellas, el 85% están en Galicia.

“Respetamos que haya personas a las que no les guste nuestra actividad, pero no podemos aceptar las calumnias de determinadas organizaciones y colectivos animalistas, que hablan continuamente de ausencia de regulación en el sector o de pocos controles en las granjas”, lamenta la Asociación Española de Criadores de Visón (Agavi), que recuerda que las granjas de España “están entre las mejor controladas a nivel mundial” y que todas tienen el certificado WelFur de bienestar animal.

Las granjas de visones en España generan más de 1.500 empleos directos y 3.000 indirectos entre los proveedores de piensos, paja, encargados de productos sanitarios, zoosanitarios y fitosanitarios, desinfección, gestión de residuos, entre otros.

“Pedimos respeto para miles de familias que están muy preocupadas por la paralización de la venta de pieles a China, por el COVID-19, y a Rusia, por la guerra de Ucrania, dos de los grandes mercados internacionales junto con Corea”, afirma Agavi, que asegura también que cuenta con un servicio veterinario propio y que todas sus granjas son evaluadas varias veces al año por profesionales independientes, además de las comunidades autónomas y el Gobierno central.

Por último, los criadores de visón demandan ayuda para superar el actual bache: “Si superamos esta situación, el futuro es prometedor porque las casas de subastas internacionales estiman una demanda de 35 millones de pieles al año y una producción de 10 millones”.