La nueva normalidad era poder volver a las calles. Como en 2019, cuando los sindicatos pudieron llenar las avenidas por última vez antes de la llegada de la pandemia. Y con un escenario, el actual, tanto o más enrevesado que entonces. Con una inflación superior al 8% y con la incertidumbre por bandera, las centrales de clase defienden que solo las subidas de sueldos y las políticas públicas evitarán que los trabajadores se enreden en una espiral de precarización de sus condiciones de vida. Y es lo que defenderán en Galicia, de nuevo por separado, los sindicatos CC OO, UGT (en su caso comparten convocatoria) y CIG. Un Primero de Mayo marcado por la escalada de precios, la nueva reforma laboral, el impacto de la guerra en Ucrania y un agitado contexto político.
La manifestación de Vigo, tradicionalmente la más numerosa, arranca a las 11:30 de Vía Norte, en el caso de la citada por CC OO y UGT. La CIG parte de la Doblada media hora más tarde. Entre las tres centrales hay convocadas 25 marchas en toda Galicia. La nacionalista defenderá la aprobación de un paquete de “medidas urgentes” para atajar el golpe inflacionario, especialmente en el mercado energético, aspecto que también reivindicarán Comisiones y UGT.
Las marchas estarán capitaneadas por la secretaria general de CC OO Galicia, Amelia Pérez y sus homólogos en UGT y CIG, José Antonio Gómez y Paulo Carril, respectivamente.
