El embajador de Portugal en España reiteró “el impuso y el apoyo” de su país a la expansión de Zendal en su reciente visita institucional a la sede central en O Porriño. La compañía aprovechó la presencia de João Mira-Gomes para anunciar el fin de las obras de la fábrica ubicada en Paredes de Coura a finales de este año como muy tarde. Será la primera planta de vacunas de salud humana en suelo luso, pieza clave del plan de Zendal para crear un polo biotecnológico en la Eurorregión Galicia-Norte de Portugal y un viejo sueño cumplido del Ejecutivo luso, obcecado desde hace mucho tiempo con incorporar al sector en la diversificación de su economía. Lo reconoció el propio primer ministro António Costa en la puesta de largo del proyecto hace un año: “Esta inversión de Zendal sitúa a Portugal en una posición estratégica frente a crisis sanitarias, como la actual causada por el COVID-19, asegurando la implicación de toda la cadena de valor del sector salud”.
La inversión ejecutada asciende a 22 millones de euros. Se están levantando la zona de producción, áreas técnicas, almacén, oficinas y una depuradora para tratar las aguas residuales. La factoría apenas ocupa el 8% de los 50.111 metros cuadrados de superficie en las 33 parcelas adquiridas por Zendal en el Parque Empresarial de Formariz, el equivalente a siete campos de fútbol profesional.
Queda terreno libre de sobra porque el proyecto es mucho más ambicioso. La biotecnológica gallega planea un gran complejo industrial formado por la fábrica en construcción y otras tres más “para la producción y envasado de vacunas y otros productos farmacéuticos”, un edificio de almacén y control de calidad y la depuradora como “complemento de la actividad” del grupo en Galicia, según recoge el estudio de impacto publicado por la Agência Portuguesa do Ambiente.
“El nuevo complejo industrial de Zendal es de suma importancia para la Eurorregión Galicia-Norte de Portugal en el área de biotecnología, en un contexto de mayor demanda de vacunas virales y bacteriológicas para uso humano y veterinario, además de la producción de otros medicamentos –indica en el informe–, a lo que recientemente se ha sumado la necesidad de capacidad para la producción de vacunas virales destinadas a combatir el COVID-19”. La compañía enmarca el proyecto “en una estrategia de desarrollo territorial” que “priorizó la captación de inversiones industriales que destaquen por la innovación y el empleo de mano de obra cualificada”. Además de los beneficios “directos e indirectos” para la población de Paredes de Coura, Zendal destaca la futura mejora de “la intensidad exportadora” del municipio y su perfil económico “al operar en sectores de alta y media-alta tecnología”.
Atraso de calendario
Tres de las plantas industriales previstas son inmuebles nuevos y la cuarta, la que está actualmente en marcha, nace de la modificación de un recinto de almacenamiento de productos farmacéuticos ya autorizado. Junto a la depuradora integra la fase inicial del proyecto. La primera fábrica se destinará a vacunas víricas/bacterianas humanas y empleará a 30 personas: dirección, cinco técnicos superiores, un administrativo y 23 operarios. El calendario va con atraso. Se esperaba abrir el recinto el pasado 2021 y lo hará finalmente a lo largo de este año.
El cambio de la fecha inaugural alterará seguramente las siguientes fases. En la 2, estimada para 2022, irán la planta de producción de inyectables de un medicamento férrico y el edificio que albergará el almacén y el control de calidad. Ambas zonas suman un total de 53 efectivos. La fase 3 incluye otra factoría para vacunas humanas de antígeno vírico igual a las dos plantas de producción anteriores y la incorporación también de 30 empleados. El arranque estaba fijado para 2024. La última de las fábricas, en 2026, elaborará vacunas de uso veterinario de la mano de otra treintena de operarios.
Capacidad inicial y máxima
Una vez concluido, el complejo industrial contará con 143 puestos de trabajo, de los que 38 serán técnicos superiores. Habrá tres turnos de mañana, tarde y noche durante cinco días a la semana que permitirán mantener la actividad casi las 24 horas, a excepción de la parada de 6.00 a 7.00 de la mañana, según recoge la documentación remitida a las administraciones portuguesas. Zendal tendrá en Portugal una capacidad de producción inicial de 63 millones de unidades al año. “Esta estimación depende de la búsqueda de mercados y la existencia de nuevos proyectos”, explica el grupo capitaneado por Andrés Fernández. La capacidad máxima de las instalaciones asciende a 348 millones de unidades.
Zendal alaba las comunicaciones de Paredes de Coura y su entorno, “una comarca privilegiada desde el punto de vista de la accesibilidad vial”. A la elección del emplazamiento ayudó la construcción de una nueva variante de conexión con el polígono de Formariz que situará el complejo industrial a hora y media del aeropuerto de Sá Carneiro y a 50 minutos de Peinador; y a hora y 20 minutos del puerto de Leixões, a 50 minutos del de Viana; y a poco más de una hora del de Vigo.
“Como parte de su estrategia de expansión, el grupo Zendal está llevando a cabo importantes inversiones para ampliar y mejorar sus instalaciones de producción”, enfatizan los responsables de la firma de O Porriño, que contempla el desembolso de más de 110 millones de euros antes de 2025, apoyándose en los fondos Next Generation. Así quiere dar respuesta “a la creciente demanda” de su mercado “en consonancia con los últimos avances tecnológicos, medioambientales y de calidad”. El desembarco al otro lado del Miño implicará colaboraciones “con centros de formación profesional, universidades y centros tecnológicos”, aprovechando “las sinergias de la Eurorregión”. Más allá del COVID-19, el grupo apuesta por el desarrollo de vacunas humanas para otros virus como el Chikungunya, la fiebre Lassa o el Zika.
El nuevo complejo
Tres turnos para 23 horas diarias
El complejo de Zendal en Portugal funcionará cinco días a la semana con tres turnos para cubrir 23 horas ininterrumpidas.
Las comunicaciones del polígono
La biotecnológica alaba la accesibilidad del recinto, a entre 50 minutos y hora y 20 de los puertos y aeropuertos de Vigo, Porto, Viana y Leixoes.
Mucho más que el COVID-19
El grupo quiere desarrollar vacunas de virus como el Chikungunya, Lassa y el Zika.
Un sector cada vez más estratégico en Galicia
Zendal es la punta de lanza de un sector en el que la economía de Galicia tiene muchas esperanzas puestas. El grupo de O Porriño facturó casi 50 millones de euros en 2018, según la información incluida en el estudio ambiental de su proyecto en Portugal. Además de la producción a escala europea de la vacuna de Novavax para el coronavirus, su desarrollo del antígeno de la tuberculosis promete otro gran despegue del negocio. Durante 2020, aquí se crearon casi el 30% de todas las biotech constituidas en España y es la sexta comunidad con más empresas del sector activas. El último Informe Asebio 2020 elaborado por la Asociación Española de Bioempresas resalta “la mejora de posición competitiva” de Galicia, donde la facturación media de casa sociedad supera los 7 millones de euros. “Galicia lleva años situándose como una de las comunidades más bioemprendedoras”, destaca el clúster Bioga, presidido por Carme Pampín. Lonza acaba de reservar 102.000 m2 en la Plisan para un proyecto todavía bajo secreto. La multinacional suiza, con 40 factorías en Europa, América y Asia, tiene en O Porriño la mayor planta de cultivos celulares para uso farmacéutico del país. Su nueva inversión supera los 5 millones de euros. Compartirá emplazamiento con BETA Implants, otra de las prometedoras firmas de la biotecnología made in Galicia.
