La creciente importación de lomos de atún congelados, tanto de países que subsidian al sector pesquero como de los que gozan de aranceles cero, deja en la encrucijada a la industria gallega que se dedica a su producción. “El descenso en la demanda de nuestro mercado nos obliga a adaptar nuestra capacidad productiva”, inciden fuentes del grupo Atunlo. Y este es el motivo que aluden para explicar el despido de 14 trabajadores de su factoría de O Grove, ejecutado esta semana. “Estas medidas tienen como fin asegurar la viabilidad [de la empresa] y el mantenimiento de los restantes puestos de trabajo”.

Por contra, el sindicato CIG, en rueda de prensa, arremetió contra la pesquera viguesa por haber notificado las extinciones “sin previo aviso” y “sin cumplir parte de los acuerdos a los que se había comprometido”. La delegada Mar Vila anunció la convocatoria de movilizaciones contra los despidos.