En la puerta de entrada o directamente en los lineales del aceite, es muy posible que los gallegos que hagan la compra este sábado en el supermercado se encuentren con un cartel de aviso con la limitación de la venta de las botellas de girasol. La mayoría de las cadenas de distribución alimentaria que operan en la comunidad dan el paso después de detectar en los últimos días “un nivel desproporcionado” de compras del producto, como ocurrió en el arranque de la pandemia con el papel higiénico. ¿Qué pasa esta vez? Que Ucrania es uno de los grandes proveedores de aceite a Europa, con el 62% de todas las importaciones del de girasol de España. La partida superó los 423 millones de euros el pasado ejercicio, sin contar el flujo de cereales que se transforman luego aquí para la elaboración del aceite. Las empresas del sector consultadas por FARO niegan que ahora mismo exista un problema de suministro. Y quieran que siga así, pensando, sobre todo, en esta vez la hostelería está abierta y es un cliente muy intensivo de aceite. “Lo que pretendemos es justo evitar que haya un problema”, apuntan las mismas fuentes. 

Estantería con escasez de aceite de girasol

Vegalsa-Eroski lidera la distribución alimentaria en Galicia. Tiene 270 establecimientos en la comunidad, Asturias y Castilla y León. Para el formato de tienda de Eroski y Familia, se permitirá la adquisición de 5 litros por persona. En los puntos de Cash Record, orientados a venta al por mayor, lo máximo serán dos cajas por cliente al día. “Se trata de racionalizar”, aseguran en el grupo, “de ordenar para evitar otras situaciones”.

También Mercadona, con más de medio centenar de supermercados abiertos en Galicia, se ha decantado por restringir la comercialización del aceite de girasol: 5 litros en cada compra. La medida afecta a las tiendas físicas y el canal online, en buscar de normalizar los movimientos de acopio que se están notando estos últimos días, desde el arranque del conflicto en Ucrania. Los mismos carteles aparecen ya en Consum y en otros grupos de distribución, que se han decantado por adelantarse a los posibles cuellos de botella que se den a corto o medio plazo. “Es imposible descartar que así sea”, aseguran desde una de las cadenas a FARO, a la vista del recrudecimiento del ataque de Rusia y las consecuencias para la industria y la logística ucraniana.

Ahora, los supermercados de la compañía gallega Gadis ya han comenzado también a advertir que la cantidad de aceite de girasol de cualquier marca está limitada a tres unidades por cliente y día.

Cartel que avisa de la limitación sobre el aceite de girasol en Gadis.

Los hogares de Galicia compraron más de 50.100 toneladas de aceite en 2020, a una media de 18,5 litros por habitante en un ejercicio de fuerte demanda por los confinamientos. Incluso sin la pandemia, la comunidad destaca entre las más consumidoras de aceite en toda España –junto con las Islas Baleares– y el de girasol supuso el 35%, según el último balance anual del Ministerio de Agricultura y Alimentación. El más demandado es el de oliva –63% de cuota en Galicia–, donde España es una superproductora.